Cold Feelings || [ Binwoo +18 ]

Capítulo 45

●❯────────｢ Fanmeeting ｣────────❮●

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Al terminar el concierto, la hora de conocer al idol llegó. Los fans se iban colocando en las banquetas que habían enfrente de la plataforma que contaba con una extensa mesa y en la pared de atrás, la imagen de su nueva canción siendo proyectada se reproducía.

Dongmin se sentó, cruzando sus piernas y brazos esperando a que Wonho apareciera. Estaba cansado, y mucho. Sus pies dolían tanto que sentía que si se levantaba una vez más se iba a desplomar en el suelo.

Tomó su celular y comenzó a buscar información más a fondo del idol. Y lo que encontró lo hizo suspirar, sabiendo que Sanha se decepcionaría bastante si llegara a leer todo esto.

Wonho había sido acusado en reiteradas ocasiones de abuso sexual por fans. Por consumir y vender droga en grandes cantidades. Por lavado de dinero, y por un casi intento de homicidio hacia una menor que se negó tener sexo con él.

Pero claro, todo eso eran simples "rumores".

No hubo pruebas suficientes que lo delataran, y las fans que alguna vez lo demandaron nunca más se han vuelto a pronunciar. La mayoría en internet dicen que es falso, que solo están tratando de difamar a Wonho porque es uno de los idols más exitosos en la industria musical.

Rodó los ojos mientras un amargo sabor se instalaba en su boca. Ese tipo le estaba comenzando a desagradar, y mucho.

—¡Ahí está! —exclamó con euforia una fan posicionada al lado de Dongmin, el cual se asustó por el repentino grito y casi deja caer su celular al suelo.

Instantes después, el lugar comenzó a llenarse de gritos y halagos, mientras miraban a Wonho quien se aproximaba desde uno de los laterales del escenario saludando y sonriendo en grande.

—¡Hola, hola! —saludó alegre mientras tomaba asiento en el centro de la mesa—. ¿Cómo se encuentran WENEE? Espero que muy bien. ¿Están disfrutando esta noche? —las fans afirmaron—. Me alegro.

Minutos pasaron, en los que Sanha llegó del baño y casi se puso a llorar por no haber podido estar cuando su idol entró. Ambos estaban sentados, pacientemente esperando para que los del staff a sus laterales los llamaran.

—Somos los últimos. —pronunció Dongmin, viendo el número en el boleto que tenían—. ¿Por qué siento que los compraste a última hora? —levantó una ceja, encarando a Sanha el cual desvió la mirada de inmediato, poniéndose rojo por la vergüenza.

—Es que... —tragó duro—. Estaba tan emocionado de que mi padre me dijo que me las iba a comprar que me la pasé gritando en mi cama de la emoción... y me olvidé que los boletos no son infinitos y tienen un orden.

—Eres un tonto. —Dongmin golpeó la frente de Sanha con su dedo índice, haciendo palanca con el pulgar y recibiendo un lloriqueo del contrario.