El Heredero De Drácula

𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 26

Después de haber salido con éxito del museo con la lanza del destino en nuestras manos nos alejamos lo más qué pudimos del lugar para qué Metatrón se pudiera recuperar de la pelea contra ese demonio ya qué sí no está bien no puede llevarnos de regreso hacia Canadá.

Después de tanto caminar por las calles llegamos a una pequeña plaza, el ángel se acercó a una banca y tomó asiento.

—No te ves para nada bien — Le dice José.

—Dime algo qué no sepa — Contesto el ser celestial —.Use casi todo mí poder en contra de esa demonio, estoy completamente cansado.

—¿Necesitas algo en concreto para recuperarte o solo necesitas tiempo? — Pregunté.

—Esto es cuestión de tiempo, en unos minutos estaré cómo nuevo.

—No es por presionarte ni nada pero...

Detuve mí habla tras comenzar a recibir señales de comunicación mágica en mí cabeza, alguien se estaba tratando de cominicar conmigo, al comenzar a escuchar el mensaje note qué se trataba de un hombre.

Era uno de los primeros híbridos, el brumiho, Min Ki.

Al escuchar todo lo qué me dijo me quedé helada, el demonio Abigo había estado presente en Corea, envenenó a Bastián con su sangre y tal parece qué ahora mismo él no se encuentra para nada bien.

—Cordelia...— José me mira de forma extraña —.¿Qué pasa?, ¿Todo bien? — Pregunta él.

—No — Negué con la cabeza —.Nada está bien.

—¿Qué quieres decir? — Pregunto el ángel confundido.

—Acabo de recibir un mensaje mágico de parte de Min Ki, hay problemas en Corea.

—¿Problemas en Corea?, ¿Qué sucede? — Cuestiona preocupado el príncipe heredero.

—Abigo, el demonio apareció allá, Bastián peleó contra él pero el demonio envenenó a Bastián con su sangre y ahora mismo no se encuentra bien, está sufriendo mucho y necesitan qué vayamos a Corea, todos piensan qué tú Metatrón puedes hacer algo por él.

—¿Puedes hacer algo por Bastián? — Pregunta José mirando al ángel —.¿Puedes curarlo verdad Metatrón?

El ser celestial se quedó pensativo un momento y después asintió con la cabeza.

—Yo conozco la forma de curarlo del veneno del demonio.

—¿Cómo? — Pregunté.

—Mí sangre, sí la sangre del demonio es veneno mí sangre es la cura, sí le doy mí sangre a Bastián entonces él estará bien nuevamente — Contesta.

—Genial, entonces vayamos a Corea para ayudarlo enseguida — Dice José.

—Lamentablemente no van a poder ir a ninguna parte — La voz de la demonio de la irá se hizo presente a mis espaldas.

Doy media vuelta y la veo.

—Ya me han cansado, en especial tú bruja — Dice ella seriamente mientras sus ojos se volvían negros —.Voy a desaparecerlos de la existencia de una buena vez.

No puedo permitir qué se lleve la lanza, tengo qué pensar en algo y rápido.

—José protegue la lanza...— Dije seriamente sin apartar la mirada de Amon —.Y tú ángel recupérate para qué puedas llevarnos a Corea para ayudar a Bastián — Mis dos manos se envuelve en una poderosa aura mágica.

—Cordelia, sé lo qué estás pensando, no seas estúpida no puedes pelear tú contra ella — Dice el ser celestial.

—¿Quién lo dice?, ¿Tú?, tú no conoces cómo soy Metatrón, suelo ser muy peligrosa cuándo me molestó y aún peor cuándo no me permiten llegar a un lugar para ayudar a un amigo — Respondí.