[𝟲] 𝗖𝗼𝗻𝗳𝗶𝗱𝗲𝗻𝗰𝗲

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Ella llegó sana y salva, entró a su casa y luego a su cuarto con rapidez, no quería ver ni saber nada de ningún miembro de su familia.

Cerró la puerta detrás de ella y lanzó la mochila de los chicos a su cama, levantó su mirada solo un poco y ahí se encontró a Jisoo frente a sus ojos, con mirada fija e intimidatoria.

Jennie no quiso admitirlo, pero realmente sintió cuando su corazón se paralizó por unos segundos al verla, sin duda alguna le seguía dando miedo, aún más porque ya no recordaba los dos cuernos ni la sonrisa que se encontraban en su demonio, sentía que ya la había olvidado, y ahora tenerla al frente casi la hizo desmayarse.

—¿Qué tal tu día en la escuela, amore mio?

Jennie soltó un quejido y bajó de su hombro su propia mochila, volviendo al mismo procedimiento de dejarla en su cama al igual que la otra. Pronto fue ella quién se sentó, soltando gemidos de dolor al sentir como su cuerpo respondía al movimiento después de los golpes, era una sensación para nada linda.

—Terrible.— Ella responde, se dignó en empezar a hablar con ella, con más normalidad.

Y tanto era su valor, que se atrevió a decir:

—No te vi desde la mañana, ¿Dónde estuviste? ¿Con el estúpido de Dongwoo? No me digas, ¿Te absorbió con su encanto?

Abrió sus ojos después de decir eso para luego ver la reacción de Jisoo quién mantenía la boca un poco entreabierta para que luego lanzara una carcajada fuerte al aire.

—¿Qué?— Siguió riendo con fuerza.— Cariño, ambas sabemos que él es un idiota... Además, ¿por qué alguien como yo se fijaría en un humano como él? No tiene sentido.

Jennie pensó unos minutos.

"Entonces tampoco debería de estar enamorada de mí, no tiene sentido"

Jisoo solo rió, respondiendo a los pensamientos de su humano.

—Te equivocas, no estoy enamorada de ti, solo llamaste mi atención, es todo.

"Auch..."

Bueno, no importa.— Se levantó un poco y tomó la mochila de los chicos, poco a poco fue sacando las tareas mientras leía las instrucciones y Jisoo le lanzaba una mirada expectante.— Tengo que hacer todo esto para mañana.— Le enseñó las tareas a Jisoo, quien las tomó y leyó solo un poco.

—¿Por qué tendrías que hacerlas?— La miró con un semblante realmente serio.

—P-porque-e.— Tragó saliva para dejar de tartamudear al frente de quien la miraba con ojos cansados y enojados.— Ellos me golpearán.

—¿Y tú por qué les darías el gusto?— Ella tomó la hoja por los extremos y Jennie abrió los ojos, viéndola rasgando la hoja poco a poco.— Son...— Rasgó— Unos...— Rasgó otro poco— Idiotas.— Terminó de decir a la vez que caía la hoja hecha dos trozos al suelo con lentitud.

—¡Ji-jisoo! ¿¡Por qué hiciste eso!? ¿¡Qué les diré a los chicos!? E-ellos, ellos me golpearán... Me darán una paliza si no hago sus tareas.— La primera lágrima después de treinta minutos, cayó.

—¿Sabes?— Tomó la mochila y agarró todas las tareas.— No me interesa.— Y sin más todas las hojas que tenía en sus manos empezaron a quemarse, volviéndose polvo, sin utilidad. Jisoo las había desintegrado.

La Princesa Del Demonio  [JENSOO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora