Contexto:
En el libro dos de "Bajo el Roble", después de que Max recibiera los consejos de Sidina de "ir a la cama de su esposo", Maximilian va, decidida a reconciliarse con su esposo, Riftan Calypse, el mejor caballero que haya existido.
En esta ocasión, ella no bebió toda la botella de vino, dormitando en la llegada de Riftan a la habitación.
*****
"El recuerdo de ella desangrándose cauterizó mi mente, y a pesar de verla tan hermosa junto a mí me obligué a dejarla descansar y alejarme de ella por miedo a no poder gobernarme por completo".
Al levantarse sintió como unos frágiles dedos sujetaron el dobladillo de la camisa que comenzaba a ponerse con prisa.
—Sigue durmiendo...
Su voz se corto de golpe al observarla sonrojada con una mirada tibia y cristalina en el gris que le encantaba perderse. Sus mejillas rosas, sus labios temblorosos, y ese cabello, la hermosa nube carmín que caía por sus hombros como cascadas desplegando a su vista sus hermosos pechos.
—Ri-Riftan —susurró temblando al inclinarse más hacia él —... no te vayas...
Escuchar ese susurro lleno de excitación provocó que su cordura y esas cadenas que la sostenían se rompiera casi por completo.
Sus mejillas ardieron tensando su rostro reprimiendo el impulso de romper la distancia entre ellos y entrar en ella lo más rápido posible.
—... no-No me dejes —dijo gateando hacia él con cautela temiendo ser rechazada una vez más —, p-por favor...
Sus labios temblaron y unas cuantas lagrimas amenazaron con salir rodando por sus mejillas rosadas.
La vio lleno y cegado por el deseo. Apretó sus puños tratando de reprimir ese impulso salvaje de tomarla y beber de su boca sin dejarla aliento pero se arrepintió. El recuerdo de ella herida y empapada de sangre trato de castrar su deseo que era más fuerte que él.
Con temor a lastimarla por no poder controlarse al deseo inminente que le provocaba, se deslizó hasta el otro extremo de la cama recargándose sobre el otro respaldo.
Sentía muy caliente la nuca que ardía como si trajera una braza al rojo vivo en su piel, y sus mejillas cobrizas se tornaron aún más carmín al verla hincada entre sus piernas que huían de ella como si se tratara de una maldición.
El rostro de Max ardía en furia, mordiéndose los labios y apretando el dobladillo de su escueta y traslúcida camisa de dormir. Su respiración agitada hacia bailar sus pechos hacia arriba y abajo en un son cadencioso y provocador descubriendo lentamente sus pezones endurecidos, rosados y dulces.
Maldijo por lo bajo al sentir su dureza palpitar bajo sus apenas abrochados pantalones. Apretó aún más sus puños negándose al impulso salvaje de poseerla.
—... Maxi —susurró con voz ronca tratando de calmar cada ápice de dolor que le causaba no poder entrar en ella —, no quiero lasti...
Abrió los ojos con asombro al verla inclinarse y besar su abdomen que temblaba con cada dulce tacto de sus labios húmedos y tibios.
Siseó como una enorme serpiente apretando con tanta fuerza con las manos el respaldo hasta hacerlo crujir al sentir los labios temblorosos de Max deslizarse por debajo hasta llegar a su pantalón sin cerrar.
—... detente —dijo en tono amenazador, pero sin la más mínima intención de que parara.
Dejó escapar un gemido ronco al ver su mirada excitada y sus manos temblorosas que comenzaban, con temor y un poco de duda, a bajar su pantalón.
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FanFic de Riftan y Maximilian
RomanceEn el libro 2 de "Bajo el Roble", ¿Qué hubiera pasado si Max no se tomaba todo el vino y se quedara dormida en la habitación de Riftan? ¿Qué hubiera pasado si Riftan la hubiera despertado al encontrarla en su cama en el castillo Etileno? ... ¿Qué hu...