"La vida es como una gran montaña rusa, cuando estás arriba te sientes eufórico pero también sientes miedo porque sabes que ahora irás hacia abajo, no sabes cuántas curvas tomaras, no sabes cuántas subidas o bajadas tendrás pero de algo estamos seguros, en algún momento acabará nuestro viaje."
Eran como las 10:00am cuando un suave ruido despertó a JungKook, se removió algo incómodo por haber dormido en el sofá, soltó un suave suspiro y por fin se digno a abrir los ojos con lentitud y pesadez.
—Buenos días, Kookie—Fue lo primero que escucho encontrándose con su cariñoso novio aún lado suyo con esa sonrisa cuadrada tan peculiar en su lindo rostro—Vamos, levántate Kookie, hoy es un lindo día.
El pelinegro suspiró pesado asintiendo con la cabeza, se levantó de su no muy cómodo lugar y camino hacía su desastrosa cocina, agarró su tazón de Iro Man y se sirvió un poco de cereal con leche, no por hambre sino porque no había comido hacía ya dos días. Se volvió a posar en su sofá y miró fijamente la puerta, como esperando a alguien.
—Deberías llamar a Jiminnie, está preocupado por ti— Sugirió su castaño novio mientras se sentaba a su lado.
–No quiero hablar con nadie— Contestó algo cortante sin quitar la vista de su puerta.
—Vendrá si no le llamas— Advirtió pero JungKook no hizo señal de importarle algo más que no fuese mirar la puerta. Tae suspiró algo preocupado viendo fijamente a el menor, queriendo consolarlo— ¿Recuerdas como nos conocimos, Kookie?
Y por primera vez Jungkook quitó la mirada de la puerta para verlo. ¿Qué si recordaba como lo había conocido? Claro que sí, últimamente más que nunca.
"En ese época era otoño, un otoño muy frío pero colorido, habían finalizado los exámenes y todo era paz para JungKook, hasta esa tarde cuando un torpe chico decidió tirarle dos cafés encima.
La gente normal se hubiese molestado pero Jungkook no, él solo se preocupaba por el chico de lentes redondos y rodillas raspadas, enseguida lo ayudó a levantarse y se aseguró de que sus heridas no fuesen graves, varios «Lo siento» salían de la boca del castaño junto con algunas reverencias y aunque Jungkook le había dicho que no había problema el pequeño y simpático TaeHyung le ofreció un café como disculpa"
—Lo recuerdo, me tiraste café encima—Susurró algo melancólico y rió un poco al recordar la cara de angustia de el castaño—Tenías diecinueve años pero parecías de quince.
—Tú eras un bebé de diecisiete años— Rió el castaño observando a JungKook desde la cocina—Te vez diferente, eres más guapo.
—Siempre he sido guapo, Hyung— Los dos se miraron con una linda sonrisa y Tae asintió.
—¿Recuerdas nuestra primera cita?
El pelinegro se encogió en el sofá abrazando sus piernas y sonriendo ligeramente.
"Había pasado un año y algunos meses desde que Tae había tropezado con JungKook, en ese año el menor, como buen acosador, había descubierto que Tae trabajaba en una cafetería la cual el pelinegro empezó a frecuentar logrando que el castaño le atendiera, y poco a poco su amistad fue creciendo pero algo crecía también dentro de los dos, se estaban enamorando. Tae fue el que dio el primer paso e invitó a JungKook a su linda morada para ver películas y comer algo. Esa noche fue inolvidable para los dos."
—Me invitaste a tu casa y vimos "buscando a Nemo", luego Hoseok se invitó solo y nos hizo reír con sus ocurrencias—Rió mientras lo recordaba pero en sus ojos no había alegría, solo melancolía.
—¿Recuerdas cuando me pediste ser tu novio?—Susurró melancólicamente Tae mientras veía por la ventana la lluvia caer.
"Era una noche de primavera, Jungkook se había quedado en la casa de Tae luego de haber llegado con comida y helado, era realmente una noche completamente normal para los chicos.
ESTÁS LEYENDO
Sofá [O.S TaeKook-KookTae]
Fanfiction"---Kookie, debes dejarme ir... ---¡No, todavía tenemos muchos planes juntos! ---Quiero que encuentres a un buen chico que te de todo lo que yo no pude... ---Tú eres el único para mí... Así que vuelve a casa, solo vuelve Taetae" 🐾🐾🐾Información🐾�...