Capítulo 13: Prepararé la dote.

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Lan XiChen comenzaba a sospechar que los ghouls acuáticos "de alto nivel" en los que tanto insistía el lider Jiang, eran una infame mentira. Pero claro, siempre que insinuaba aquello, la respuesta tajante que obtenía sería: "¿Crees que habría dejado a Jin Ling con el estupido de Wei WuXian si no fuera un problema real?. ¡Vamos! No soy estúpido, se el peligro que corre a su alrrededor". Las primeras veces creyó en sus palabras, pero ahora que más de una semana y media había transcurrido sin un ghoul a la vista, se comenzaba a preguntar las verdaderas intenciones del líder Jiang.

—WanYin, porque no solo me dices que querías que viniera a Yunmeng para estar contigo y nos dejamos de juegos. ¿O caso también lo hiciste para evitar que volviera a mi reclusión y molestar a los ancianos de mi secta?.

Desde muy temprano habían salido a comprar ingredientes para la comida de ese día, la misma rutina se venia repitiendo desde la llegada del líder Lan; Jiang Cheng se había encargado de preparar sin falta la comida todos los días para él, y Lan XiChen no tenia queja alguna.
Así que parte de la mañana se había consumido de esa forma. Hasta que el Lan no se resistió y arrastro al Líder Jiang hacia un callejón para someterlo contra la pared y dar por terminada la mentira de la "misión legendaria de ghouls".

Pero el líder Jiang era tan terco y obstinado como para admitir que el de túnicas blancas tenia un poco de verdad en sus palabras, así que hizo un intento para empujarlo lejos y  salir de ahí (salvando un poco de cara en el proceso), pero al no lograr moverlo ni un milímetro se rindió pesadamente.

"Estos Lan si que son fuertes".

—Apuesto a que te mueres por escucharlo, pero una vez veas a los Ghouls no seré yo quién quede como un idiota— siseaba para intentar una vez más salir de su aprehensión. El mismo fracaso de antes— Vamos Lan Huan, suéltame de una vez.

—...Esta bien— el Lan obedeció, no sin antes depositar un casto beso en sus labios. El rostro que antes reflejaba hastío y despreció se quebró, abriendo paso a una expresión descolócala y un fuerte sonrojo en las pálidas mejillas del líder Jiang— Eres libre.

—¡Tú!— Zidian vibro en una clara señal de amenaza, Lan XiChen inteligentemente se alejo al menos 10 pies con una sonrisa—¿¡En que carajos estas pensando!?, no vuelvas hacerlo en un lugar público— Jiang Cheng miraba hacia la entrada del callejón, una vez se aseguro de no tener testigos de la hazaña cínica del Lan se relajo un poco— alguien podría vernos y sería nuestro fin.

—Exacto, alguien podría hacerlo —Wei WuXian hablo desde arriba del tejado al ver que el espectáculo había terminado— Pero tranquilos, solo soy yo quien tuvo la "bendición" de atraparlos— con una expresión burlona y un guiño juguetón agregó— su secreto esta a salvo conmigo Shidi, cuñado.

—¡WEI WUXIAN! —Aprovechando el ligero aturdimiento del Lan, el de túnicas moradas salió corriendo tras su hermano— ¡Vuelve aquí, idiota! ¡Te romperé las piernas!.

Ambos se sintieron como si volvieran a los viejos tiempos de su adolescencia, corriendo en los muy calurosos días por todo Yunmeng, creyéndo ser invencibles ante todo. Los últimos 20 años parecían haberse esfumado en una abrir y cerrar de ojos; Wei Wuxian corría como si su vida dependiera de ello, aunque no estaba tan lejos de la verdad. Cuando vió a su querido esposo se sintió aliviado; era oficial, viviría un día más.

Lan WangJi admiraba las cristalinas aguas de los alrededores del embarcadero de lotos cuando escucho pasos apresurados hacia su dirección, al mirar por arriba del hombro vió a su esposo corriendo y agitando los brazos como demente—¡Lan Zhan! ¡Er-Gege!. Jiang Cheng quiere regresarme a la otra vida, no lo dejes hacerlo mí buen Lan Er-Gege.

Jade Dorado (Zhuiling)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora