La semilla de la vida

Erase una vez un reino lejano, donde la vida tanto humana como vegetal era extensa y amplia, el sol brillaba con fuerza  alimentando los cultivos de los campos y la gente iba de un lado para otro haciendo sus quehaceres, soldados uniformados mantenían un orden que nunca era quebrantado, parecía que nadie quería hacer mal alguno en el reino de Erloden.

Sin embargo un día ocurrió algo extraordinario, el cielo se cubrió de unas nubes grises como la ceniza, volviendo la tierra seca e imposible de cultivar. El rey de los arboles que era un enorme roble plantado en uno de los patios del castillo real, se seco sin ninguna explicación, había una  leyenda por la cual se creía que era el motivo de que el reino era tan prospero. El sabio de los señores de aquel reino, busco y busco en sus libros el motivo por el cual de aquellos extraños acontecimientos, sin embargo nada encontró. La delincuencia en las calles aumentaba, muertes y asesinatos, los soldados del rey desertaban, y cada día más gente abandonaba la ciudad en busca de una vida mejor.

El rey Barom que regentaba aquel reino, estaba desesperado, era consciente de que cada día moría gente de hambre o asesinados por algún maleante, cosa que nunca antes había ocurrido en sus dominios. Estaba convencido de que aquellas nubes tenían orígenes mágicos, pero no era capaz de hacer nada para hacerlas desaparecer.

Una noche el rey tuvo un sueño, pudo ver el corazón del gigantesco roble, vio como una sombra lo envolvía y lo secaba matándolo poco apoco por dentro, como se secaba tirando las hojas hasta quedarse sin ellas, al mismo tiempo las nubes cubrían el cielo de la gigantesca ciudad. Después de aquellas imágenes el rey se despertó sobresaltado escuchando en un susurro femenino las siguientes palabras.

-“El viajero blanco encontrara la semilla”

Aquella misma noche el Rey le conto el extraño sueño al sabio, que lo interpreto sacando la conclusión de que el árbol no había muerto a causa de la aparición de las nubes, sino que las nubes habían aparecido al irse muriendo el roble, y según el sueño había alguien detrás de todo aquello, pues la sombra que  secaba su corazón no significaba más que una mano con malas intenciones que había provocado aquel desastre. Y el dato más increíble, es que un viajero blanco encontraría la semilla, parecían indicaciones más que explicitas y a los exploradores se les conocía a menudo y antiguamente como viajeros, pero la connotación de blanco no tenía sentido, y la semilla era más que evidente de que se trataba de un árbol como el que se había muerto, necesitaban otro árbol que devolviera la prosperidad al reino, pero como encontrar al viajero blanco...