Michele
Me separé de Sara, y bese su frente.
—Gracias por estar siempre para mi—dije sonriendo—Para estamos los amigos, Miki—tomo mi mano—vamos, la cena esta por servirse—
Caminamos hacia la cocina, Sara venía agarrada de mi brazo como mi acompañante. Al llegar al comedor Hayley me miraba realmente seria, como si me tuviese asco. Supongo aún sigue molesta por lo sucedido, me senté a lado de Sara y Carla.
—La cena esta lista—anunció Maura la cocinera—
Los meseros comenzaron a servir la comida, hecha por un chef muy cotizado.
—Se ve exquisito—dijo Carla al ver el platillo—Gracias Miki por esta cena—me miro y mordió su labio— voltee a ver a Sara quien rodaba los ojos
—Te quiere follar—susurró en mi oído—
—Lo sé—
—Deberías darle celos a Hayley, quizá así averiguarás si le interesas—susurro—
—No suena mal— de verdad no sonaba mal, Hayley no le agrada Carla, a simple vista lo puedo ver.
La cena terminó, todos los invitados fueron al salón para seguir con el festejo. Hoy era mi cumpleaños, 31 al fin. Comenzaron a cantarme y darme abrazos
Hayley
Comenzaron a cantarle feliz cumpleaños a Michele, dándole regalos costosos... Era su cumpleaños y yo no tenía la menor idea, llegó el turno de Carla de abrazarlo. Lo tomo en brazos por minutos, se separaron y el beso su mejilla.. ¿que mierda está pasando aquí?..
—¿Vas a felicitarlo?—pregunto Stefan bebiendo champaña—
—Es un maldito idiota, la está pasando genial con sus zorras juntas—escupí de golpe—
—Vaya, pensé que él no te importaba—
—No me importa—dije y me retire—
Michele
Eran las 12:00am todos los invitados se habían ido, no era tan fan de las fiestas a horas tan largas de la noche, Lia me pidió quedarse esta noche con Carla y acepté.
Estaba por darme una ducha, mi cumpleaños había salido bien pero ella jamás me felicitó. Tenía todo menos a ella.
—Sigues despierto—Carla entrando a mi habitación
—Se debe tocar—respondió—siempre me agarras en toalla
—No me molesta lo que veo, me gusta—respondió coqueta—
—Es tarde, ve a dormir—dije sin mirarla—
—¿Puedo dormir contigo?—pregunto seductora—
Era mi idea totalmente darle celos a Hayley pero si ni siquiera nos estaba viendo, ¿de qué servía?
—No acostumbró a dormir con nadie, no te ofendas
—Podemos no dormir—se acercó a mi poniendo una mano en mi pecho—vaya que te ejercitas..
—Carla, ve a dormir—
—Follame Miki—susurró en mi oído poniendo una mano en la abertura de la toalla que cubría mi cuerpo—
—Vete—la aparte de mi—
—¿Eres maricon?—sacó su bata dejándola en lencería—
—No me sorprende lo que veo—dije, su cara cambio e intento darme una cachetada pero la detuve—dije que te vayas, ahora.
—¿Que no entiendes?—Sara..
—¿Quien te crees perra?—contesto Carla—
—Yo dormiré aquí si me permites—
—¿Dormirás con esta perra y no conmigo?—
—Así es. Vete—dicho esto ella salió dando un portazo
—Vaya que le urge follarte—dijo Sara dando un salto a la cama—
—Me iba a duchar y llegó, no es de mi interés mantener algo sexual con ella—suspire—
—Vaya, que cambiado estas. Me gusta el nuevo Miki—sonrió—
—Cállate—reí y le aventé mi toalla a la cara—
—Ahh! No quiero verte en pelotas, cúbrete—
—Jajaja, eres una dramática—
Hayley
Me había pasado de copas, estaba boca arriba en mi cama pensando. Y pensando, quería que estuvieras aquí Miki. Es un imbecil seguramente esta revolcándose con otra, no sé aún como pude dormir.
7:00am
El sol entraba por mi ventana, me sentía un poco mareada quizá bebí mucho ayer. La realidad es que no recodaba nada, solo que perdí mi virginidad de la peor manera posible por haber
Salí en pijama a tomar algo de café y galletas, cuando veo a Sara salir de la habitación de Michele en ropa interior.
—Buenos días—saludo sonriente sirviéndose café—
Yo la miraba pálida, mi corazón latía al mil por hora. Quería agarrarla de los pelos y golpearla, después de unos minutos sale Michele en toalla.
—Que madrugadora—me dice sonriendo—
— Y tu.. no has cambiado nada—solté de repente—
El me miro confundido..
—Oh... ya entiendo—río—
—Ajá.. maldita zorra— dije y salí corriendo a mi habitación para cerrarla de golpe—
Maldito! Se metió con su ex, creí que me sería leal... aunque no fuésemos nada
Michele
—¿Cree que follamos?—dijo Sara tomando una galleta—
—Eso creo, sales en ropa interior. Es entendible—dije sin importancia—
—Ve a buscarla— regaño Sara—
—Estoy cansado de siempre ser quien la busca— era verdad, cada día era más molesto y aburrido para mi.
—Es diferente, cree algo muy fuerte que claramente no pasó—hablo con la boca llena—
—Jaja, te vas ahogar. Está bien, ya vengo—tomé su mejilla y le di un beso para irme—
Al llegar a la habitación que se había encerrado con seguro, estaba realmente harto de esta situación.
—Será después—susurre para irme pero ella abrió la puerta—
—Hola..—dijo—
—Abriste, que impresión—
—Lo lamentó, no tengo por qué ponerme así. Tu y yo no somos nada—ouch
—No follamos si eso crees.—conteste—
Su cara cambio y se puso roja.
—¿Entonces?—
—Sara está con alguien más. Somos buenos amigos, quiero que lo sepas—dicho esto intente retirarme pero me tomo del brazo—
—Tremenda follada me metiste—
—¿disculpa?—
—Me gusto.—
