Almorzaba tranquilamente hasta ver dos personas que se sentaron a mi lado con sonrisas de complicidad, ni siquiera necesite apartar la vista de mi pierna de pollo para darme cuenta de quienes se trataban: Los Weasley.
- Hey, ¿Qué tal _____?.- Pregunta Fred... O tal vez George.
- ¿Qué necesitan chicos?.- Dije intentando acortar el asunto, llevándome con cuidado cualquier cosa que estuviese a mi alrededor, nunca se sabe que puedes esperar de estos dos.
- Tenemos un pequeño debate, entre George y yo.
- ¡Eh! yo no soy George, soy Fred.
- ¡No!. Yo soy Fr...
- Basta chicos, vayan al punto.- Pedí con miedo de ir al punto.
- Necesitamos que huelas esto por nosotros.- Ellos creen que soy tonta, jamás haría un favor como ese a los gemelos Weasley.
- Pueden ir y ahogarse en el Lago negro junto con su amortentia chicos, no caeré esta vez.
- ¿¡Como te atreves a creer que te haríamos algo así!?.- Protestaron antes de caminar hasta la mesa Gryffindor donde se seguían quejando.
Rei al respecto mientras caminaba hacia la salida, un largo y curioso mechón rubio se asomaba entre las puertas.
- ¿Luna?.- Pregunte al reconocer su suave cabello.
La chica solo salió corriendo, suponía que era Luna aunque no sabía por que huiría de mi.
***
Después de una exhaustiva clase de vuelo caminaba por los pasillos intentando alcanzar la clase de Cuidado de Criaturas Mágicas. Alguien corrió hasta detrás de mi, caminando a mi lado los Weasley me sonreían.
- Oye _____, ¿A donde vas con tanta prisa?.- Preguntan mientras salía al patio.
- Ahora no chicos, debo llegar temprano o Hagrid se molestara.
- Esta bien, solo tomara un segundo.
- Queríamos darte esta flor, por ser nuestro sujeto de prueba en bromas desde que nos conocimos.- Dicen dándome una linda flor purpura de la que me enamore en el instante.
- Oh chicos, es tan linda.- Dije llevándomela a la nariz para sentir el dulce olor del polen.- Huele a roció de lluvia, que relajante.- Digo.- También a perfume de flores y el amigable olor del bosque.- Algo comenzaba a tornarse raro.- Y a ¿imprenta?.
- ¿Te huele a algo más, _____?.- Preguntan con una sonrisa malvada.
- Tal vez te huela a ¿Luna Lovegood?.- Preguntan entonando un tono de cizaña del que me sonrojo.
¡Esos malditos me engañaron de nuevo!, me han dado amortentia y de la forma mas discreta posible.
- ¿Escuchaste eso Luna?.- Pregunta Fred volteando hacia la fuente de la que recién me di cuenta estaba escondida ella.
Se levanto totalmente sonrojada y camino cuidadosamente hasta nosotros donde mis mejillas también comenzaban a colorarse ante su presencia.
- Mírense, parecen dos tomates en clase de herbología.- Se burlan ellos dejándonos solas.
- Entonces...- Comencé a hablar incomoda
Ella me dio la mas dulce sonrisa y beso mi mejilla mientras caminaba tras los gemelos, sin duda me volvía loca...