Capítulo 4: Conocer a la futura novia

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Temari estaba con Baki y sus hermanos mientras la escoltaban a Konoha, una parte de ella seguía despertando todos los días en el viaje aquí pensando que había sido todo un sueño lo que estaba sucediendo. Le parecía tan irreal, pero cuanto más se acercaba al pueblo, más real le parecía. Se quedaron en posadas en el camino, pero cada día y cada paso parecía llenarla un poco más de pavor. La verdad es que le encantaba ser una ninja de Suna y amaba a su pueblo incluso teniendo en cuenta cómo había tratado a su hermano menor y lo que le hecho hecho. Pero el hecho era que ya no iba a lucir con orgullo el símbolo de Suna alrededor de su cuello, sino uno de la Hoja.

Tocó el protector que le gustaba llevar alrededor de su cuello en otra ocasión sabiendo que pronto nunca lo usaría con orgullo para que el mundo lo viera.

"¿Cómo lo llevas?" Preguntó Kankuro.

"Lo mismo", respondió ella mientras caminaban. "Solo desearía saber un poco más sobre este tipo, quiero decir, ¿fue todo ese idiota del bocazas una especie de acto?"

Se encogió de hombros, "No lo sé, pero si es bueno. Aún no veo por qué a Gaara le gusta tanto el chico".

"Todavía no pude conseguir que diera más detalles", suspiró, ya que era más una declaración que una pregunta. No importa cuánto lo intentaron, no pudo lograr que él dijera exactamente por qué. Era casi como si todo lo que sucediera entre él y el rubio fuera privado, pero de nuevo, Gaara tampoco era la persona más abierta incluso antes de su nuevo cambio de opinión.

"Bueno, parece que estamos aquí", dijo Baki sacando a Temari de sus pensamientos.

Suspiró al ver las enormes puertas, cuando las vio por primera vez pensó que eran impresionantes. Ahora, mirándolos, se dio cuenta de que los estaba viendo por el resto de su vida cuando se fuera y regresara a la aldea. Podía ver a varias personas esperando junto a las puertas y supuso que era su comité de bienvenida. Ella trató de prepararse para esto, pero con toda honestidad, ¿cómo podrías prepararte para algo como esto? Solo esperaba que con el tiempo pudiera aprender a aceptar su destino y lidiar con él.

Junto a las enormes puertas de la aldea estaba el Hokage, con Shizune, Naruto, Sasuke, Sakura y Kakashi se unía a ellos.

"Kakashi, ¿dónde estabas?" Tsunade demandó ya que el hombre ya llegaba tarde, pero eso no era nada nuevo para él.

"Lo siento, tuve que ayudar a una niña a encontrar su gato", se rió entre dientes y se frotó la nuca.

"¡Guarida!" Naruto y Sakura le gritaron.

"Eso no es algo agradable que decirle a tu sensei", les dijo Kakashi.

"Bueno, tal vez si llegaras a tiempo por una vez, deberíamos más respeto por ti", dijo Sakura cruzando los brazos mientras Naruto asentía con la cabeza. Luego se volvió hacia su compañero de equipo vestido de naranja y suspiró mirándolo. "En serio, ¿Naruto no pudiste encontrar algo decente para ponerte? Quiero decir que quieres dar una buena impresión, ¿no es así?"

"¿Qué hay de malo con esto? Yo siempre uso esto", dijo Naruto mirando el mono naranja y azul.

"¿No tienes nada que no sea tan ... naranja?"

"¡Me gusta el naranja!" dijo en defensa de su color favorito. No sabía por qué, pero le gustaban sus trajes porque tenían gran parte de su color favorito, además de que eran duraderos, abrigados y tenían muchos bolsillos, y para todas las bromas que hizo a lo largo de los años, resultaron útiles.

"¡Suficiente!" Tsunade dijo, llamando la atención de los niños, "parece que están llegando".

Esperaron mientras los cuatro shinobi de la arena se acercaban a ellos mientras Tsunade daba un paso adelante, "Saludos, como nuevo Hokage, te doy la bienvenida formalmente a la Aldea escondida en las Hojas".

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