Ghost Of You(Traducción)

Capitulo 1

No es tu culpa, huh?

Lágrimas corrían libremente por el rostro de Amity.

Le temblaban las manos mientras intentaba desesperadamente limpiarlas.

"Déjame en paz"

No puedo

"Ya te dije que lo sentía"

'Lo siento' no es suficiente

Estoy muerta 

Amity grito de frustración, uñas pintadas de negro se clavaron el el costado de un árbol. El bosque que generalmente le proporcionaba un escape de la realidad se sentía como si estuviera derrumbándose a su alrededor.

 "Estabas en el lugar equivocado en el momento equivocado".

"No Fue."

"Mi."

"Culpa."

El fantasma la miró con ojos fríos, sin rastro de simpatía en sus rasgos traslúcidos.

No hay nadie a quien echarle la culpa.

Tu culpa.

Amity se negó a mirar al fantasma, o su cadáver a solo unos metros de distancia.

Ojalá pudiera irme.

Pero estoy atrapado contigo.

Hasta que hagas las paces conmigo.

"¿Qué, hay algún tipo de libro de reglas oficial para este tipo de cosas? ¿O simplemente estás empeñado en torturarme por el resto de mi miserable vida?

Solo para asesinos.

Amity golpeó el árbol en agonía, sintiendo la sangre gotear por sus nudillos cuando la corteza áspera se estrelló contra su puño.

"Fue un accidente."

Homicidio involuntario.

El tono del fantasma fue frívolo, lo que hizo que Amity aprieta los dientes.

"¿Estás haciendo una especie de broma de mal gusto?"

Los chistes son para los vivos. En la muerte, no hay nada de qué bromear.

Amity paseaba por el claro, todavía negándose a mirar el cuerpo, negándose a mirar al espíritu, negándose a reconocer la escena. Quizás se desvanecería si lo ignoraba, como una pesadilla olvidada a la fuerza. Tenía mucha práctica.

Por favor, que sea un sueño.

Mírame.

"No."

Tan terco.

Nunca te librarás de mí de esta manera.

Eso es lo que quieres, ¿verdad?

El fantasma sonaba amargado, como si estuviera reprimiendo palabras enojadas.

"Quiero que te vayas".

Entonces mírame y recuerda. Ese es el primer paso.

"Recuerdo mucho. No necesito repetir la experiencia ".

Deja de alejarte de mí.

Amity giró sobre sus talones, encontrándose con fuerza con los ojos del espíritu. Estaban vacíos y fríos, pero aún podía recordar el calor que alguna vez tuvieron, como charcos de chocolate líquido.