Persuación

capitulo 1: cambio de casa

mi madre se casa y para hacerla peor, debemos mudarnos con ella. a mi hermana Marian y a mi no nos agradaba la idea, pero no podiamos protestar ni queriamos ya que ver a nuestra madre feliz era una dicha para nosotras.

mi madre estaba estudiando periodismo cuando conocio a Norian su primer novio y el padre de nosotras, en el transcurso de su pololeo, mamá se embarazo de Marian, congelo la carrera y se fue a vivir con Norian, despues de 3 años me tubo a mi Amelia. a los 2 años de mi nacimiento mi padre fue mandado a australia por un noticiero, 3 dias despues mi madre recibio una carta en la que decia: lo siento Emili pero no volvere, eh encontrado mi lugar y deceo vivir aqui, como se que tu no vendras conmigo eh decidido mandar dinero todo los meses para las niñas, las amo a las 3, se despide
Norian

mamá quedo sola con 2 niñas y aunque recibia dinero todo los meses y la casa ya estaba a su nombre, cuando yo cumpli 6 años, ella comenzo a trabajar en una pasteleria, donde varios años mas tarde se volvia la administradora.

hoy a mis 17 años mi madre se ah casado con un viudo millonario que conocio en la pasteleria, su nombre es Robert y tiene 46 años, 7 años mas que mi madre. es guapo y tiene porte y elegancia y la verdad se ven muy bien juntos, ya que el es moreno de pelo castaño claro y ojos color miel, bastante alto y de muy buen cuerpo y mi madre es bajita de pelo rojiso, ojos verdes, tes blanca y delgada, muy guapos ambos. termina el matrimonio civil y comienza la comida en la mansion, hasta ahora no nos an presentado a los invitados y Marian y yo estamos bastante aburridas, seguimos en nuestro auto a mamá, para conocer la casa donde viviremos hasta independisarnos (lo cual ojala sea pronto), llegamos a un serco de esos de pelicula con puertas enormes y antes se tocar el timbre nos abren, subimos una especie de colina, donde en la sima se distingue una mansion blanca con pileta en el ante-jardin.

- guauu, ¡menuda mansion!. exclama Marian boqui abierta

- cierra la boca o te entraran moscas. me burlo, ella sonrie y cierra la boca, nuestros ojos verdosos (ambas teniamos los ojos verdes) no pestañaban al ver tanta bellesa, al estacionar el auto, un hombre de abansada edad nos ayuda a bajar, para no tropesar con los tacos y nos pide las llaves, Marian se las da.

- espera ¿como me veo?. pregunta Marian

la verdad se ve bastante bien con su bestido celeste corto de que tiene una tela trasparente en la parte del cuello y hombros y su cabellos castaño suelto, tiene unas hermosas piernas que la hacen ver guapisima y una cara muy monona que la hace parecida a la actriz de titanic.
- te ves guapisima. le guiño un ojo

- tu tambien te ves guapisima, enanita. Marian siempre me molestaba por mi porte ya que mido 1,60 y no es mucho, se aserca a mi y me arregla el flequillo, mi cabello era mas rojo que el de mi madre y mis ojos eran verdes como los de Marian y mamá, pero mi rostro era algo mas redondo y mis labios eran gruesos, algo asi como Angelina Jolie, llebava un bestido color cafe oscuro de manga media descote en la espalda y que llegaba unos centimetros arriba de la rodilla con un cinturon que asentuaba mi cintura y unos tacos negros simples y una cola de caballo sofisticada, luego de hechar una inspeccion al jardin delantero decorado con flores amarillas y rosadas y muchas flores de manzanilla una pileta con unos angeles bailarines en la punta que chorreaban agua, lo encontre algo simple para una mansion. al abrirse las enormes puertas de entrada se dejo ver un salon bastante amplio y en el fondo una escalera principal muy amplia, el primer piso consistia de 6 puertas 2 a cada lado y 2 atras, el salon principal con sillas a los lados y varios muebles muy antiguos, la verdad la casa tenia aspecto de mansion del señor Darcy en orgullo y prejucio. el segundo 6 puertas y una sala principal a la subida de la escalera, la emocion de mi hermana era tal que me daba risa mirarla, sin percatarme que en la esquina derecha habia un hombre alto de cabello castaño, ojos color miel, muy atractivo me miraba severamente.