Desperté a las nueve de la mañana, me levanté de buenos ánimos, para hacer el desayuno. Le di un corto beso en la frente a Kurt antes de bajar a cocinar, John estaba dormido así que no había problema con él (ok, eso sonó pervertido), fui al cuarto de Valentina, se estaba poniendo sus sandalias, me miró a la cara después de tocar su puerta.
Valentina: Adelante, "mamá".
Yo: ¿Quieres acompañarme, nena? Cocinaré el desayuno.
Valentina: Sí.
Salimos de su habitación, se sentó en los sillones y puso las caricaturas en la televisión, por mi parte, volteaba las deliciosas tortillas a la española, les puse un poco de queso a manera que quedase doblada, saqué el jugo de arándanos y lo serví en los vasos, el omelet estaba listo, piqué cebolla y la freí, agregándola a esa apetitosa comida del día, los llevé a la mesa, sacando los cubiertos, acomodé las cosas de los niños, ya saben, decorados infantiles; llamé a todos, Kurt bajó con John, senté a Valentina en su sillita, nosotros en las correspondientes y comenzamos a desayunar, salió tema de plática con él acerca de una gira el año pasado, la cual, se canceló.
Yo: Amor, ¿por qué renunciaste a la gira con Metallica y los Guns?.
Kurt: Uff, Axl es demasiado problemático, si James salió quemado, no quisiera imaginarme lo que me hubiese pasado sabiendo que nosotros dos ya estábamos juntos para ese tiempo.
Yo: Oh, cierto, lo bueno es que te evitaste problemas, corazón.
Kurt: Tal vez tenga una gira con Nirvana.
Yo: Que bien, estarás entretenido y haciendo lo que te gusta, aunque... los días estarán algo deprimentes sin ti.
Kurt: Es mínimo un año, también estaré raro, tiene algo de tiempo que no hago lo que amo, bueno, no mucho.
Yo: Pero eso no importa ¿bañamos a los niños?.
Kurt: Por supuesto, nena.
Sonreí, llenamos la tina con agua caliente y fría, con una temperatura tolerable para nuestros pequeños, los metimos juntos, aún están chiquitos, es algo normal. Kurt los enjabonaba y yo enjuagaba; enredados en una toalla de su tamaño, calentita, salimos con los niños en los brazos, cada quién traía al niño de su género sexual, cambié a Valentina primero, en lo que le cambiaban a John, le puse un vestido rosa de manga larga, mallas blancas, zapatos negros y un suéter crema, desenredé su bonito cabello y le hice dos trencitas atadas, con pelo suelto, agregué crema y le eché un labial infantil.
Yo: Ya estás, hermosa.
Valentina: Gracias, mami, me veo muy linda.
Yo: Sí, mi vida.
Valentina: ¿Cuándo conoceré a mis abuelos?.
Yo: Tal vez no puedas conocerlos, cariño, tu papá no se lleva bien con sus papás, yo tampoco. Nosotros somos suficientes para ser felices ¿no te gusta vivir con nosotros?.
Valentina: Me encanta vivir con ustedes, tienen todo lo que esperaba de una familia.
Yo: Nosotros también vivimos bendecidos por tu presencia, no fuiste una hija querida por tus papás de antes, pero todo ese amor será recompensado con nosotros; nunca te hará falta nada.
Valentina: ¿Puedo maquillarte, mamá?.
Yo: Es que ya estoy duchada, mejor nos arreglamos en la noche, hagámos una clase de pijamada ¿pudiste dormir anoche?.
Valentina: Sí, esta casa es hermosa, las camas cómodas ¿qué más puedo tener?.
Yo: Vamos, que esos chicos deben estar esperándonos para almorzar.
Kurt: ¡Rox! ¡Vale!.
Yo: Ahí vamos.
Bajamos las escaleras, almorzamos tarta de manzana, escuchando las noticias acerca del frío clima, al parecer el día sería lluvioso, Kurt saldría al estudio o algo así, también aprovecharía para "medicarse" ya que tiene algo de tiempo que no lo hace, y eso me sorprende de una manera linda, se fue cuidadoso de casa, despidiéndose de sus hijos con un beso en la frente y conmigo en la boca, me quedé sola con los niños, ellos tomaron una siesta. Me puse a recordar un poco acerca de cómo he cambiado, ahora soy una persona más madura, con una mentalidad más abierta, introvertida, e incluso... perdí el contacto con la persona que era mi mejor amiga, Lola. También extraño a mis hermanos, mi papá, ellos son mi familia, es como que necesito su apoyo, consejos y esas cosas; mi mamá fue la culpable de que yo diera a luz antes de tiempo, es a la última persona que quiero ver por ahora, traté de tranquilizarme, tomé mi medicamento tranquilizante, tenía que hacer algo, quiero a mi papá cerca, puede aconsejarme acerca de las cosas que he hecho mal, qué puedo corregir y ese tipo de cosas, cuando los padres e hijos conviven en armonía, también seguiría el consejo o ejemplo que Kurt ha puesto en marcha, ser el padre que nunca tuvo, esta vez, yo sería la madre que nunca tuve, a pesar que viví con ella mucho tiempo, siento que me quiso a la fuerza, casi no demostraba mucho cariño hacia mí como lo hacía con mis hermanos. Lloré en silencio, no quería preocupar a mis hijos, mis pequeños; arrepintiéndome de todos mis errores cometidos, creo, que entre esos tropiezos, están implicados... Kurt. Lo amo, adoro a ese hombre con toda mi alma, es mi media naranja, pero me trae tantos problemas, los suficientes para llegar a aborrecerlo a veces; limpié mis lágrimas, ya que Valentina se dirigía a mí.
Valentina: Mamá, soñé mal.
Yo: Ven, voy a abrazarte.
Corrió con su osito de peluche, la recosté en el sillón, con su cabeza recargada en mis piernas, quedó dormida, no notó que estaba sufriendo, o por lo menos eso parecía suceder, Kurt no tardaba en llegar, me armé de valor para ver al hombre que amo y odio al mismo tiempo, nuestra relación va muy bien, pero ciertas cosas no me cuadran, salidas en la noche, nerviosismo, a caso... ¿me estará siendo infiel? No, eso nunca, él es fiel, bueno, pensándolo bien, fuimos novios, me engañó con su esposa, regresó conmigo dentro del matrimonio, sí, hay mucha probabilidad de que mis sospechas sean ciertas, cargué a Vale hasta su cuarto, para que descansara bien y para que no se asustara por lo que pasara en un rato. El timbre sonó, cuando él viene drogado o así, toca, abrí, era Kurt.
Kurt: Vengo hasta el culo, vengo mal, amor.
Yo: Tranquilo, siéntate, dame tus cosas.
Kurt: ¡No! -se negaba a entregarme el celular portátil para ponerlo en el sillón, estaba nervioso y drogado, las probabilidades de un ataque de ansiedad era demasiado densas- quiero ver a John y a Vale.
Yo: No puedes verlos, quedarán asustados, lo mejor es esperar a que tu efecto pase ¿te parece?.
Kurt: Traeme cervezas, quiero una.
Yo: Estás mal, cariño, no te traeré nada.
Kurt: ¡Quiero cervezas!.
Yo: Shh, vas a despertar a los niños.
Al parecer a eso no le prestó importancia, porque me soltó una bofetada, dejándome la mejilla derecha irritada, roja y con ardor, también estaba llorando, era triste, una total pesadilla que apenas comenzaba.
----------------------------------------------------------------
Jodeeer, pinchi Curco qlo, wey, eso no se hace, pana, probablemente un capítulo algo largo comparado con los demás, estoy ocupada con la tarea de física que me tiene un poco aturdida, acá andamos al jale bien lista, porque wattpad es primero, les agradezco por leer <3.
ESTÁS LEYENDO
Come As You Are «Kurt Cobain y tú»
FanfictionRoxana Miller es una joven de 20 años de edad que es pareja sentimental de Axl Rose (vocalista de la banda Guns And Roses) pero guarda un secreto con el vocalista de Nirvana... son amantes ¿Courtney o Axl podrán descubrir la verdad? ¿Qué pasará con...