Me pierdo en tus ojos (Madelaine Petsch y tú)

C A P Í T U L O 28

______ Williams.

Después de varios besos llenos de deseo comencé levantando su hoddie poco a poco y con su ayuda lo quitamos por completo, Mads por si sola quito su sosten lanzándolo a cualquier parte de la habitación dejándome ver los hermosos y perfectos que son sus senos, deje besos humedos por su cuello y clavícula, luego me separe de ella unos minutos para terminar de sacarnos todas las prendas que estorbaban.

Ella es tan perfecta.

mis besos descendían de su cuello hasta sus pechos, me lleve uno a la boca empezando a chuparlo mientras Madelaine gemía por lo bajo, puedo sentir lo mojada que estoy con solo escucharla, con mi mano libre comencé a masajear su otro seno.

Necesitaba más.

Baje hasta estar cara a cara con su intimidad, bese sus muslos hasta llegar a su centro donde di una larga y lenta lamida, la pelirroja soltó un fuerte gemido que me excito mucho más,  empecé a chupar su clítoris haciendo círculos con mi lengua, Madelaine inconscientemente bajo una de sus manos y enredo sus dedos en mi cabello presionándome levemente contra ella. 

Nunca imagine que hacerle sexo oral a alguien se sentiría tan bien.

—Por Dios, _____, más—habló entre jadeos.

Sus gemidos se intensificaron, esta apunto de llegar a su orgasmo; introduzco dos de mis dedos a su cavidad haciéndola arquear un poco la espalda, mis dedos salen y entran de ella rápido mientras yo aún sigo ayudando con mi boca.

Unos minutos más y Mads arqueo completamente su espalda, un gemido fuerte dejando sus labios, sus fluidos mojaron completamente mis sabanas, lamí sus pliegues limpiando un poco y luego subí a besarla, me sonrió en medio del beso y se separo un poco.

Hizo que me acostará sobre mi espalda y ella se posiciono entre mis piernas, en el momento en que nuestras intimidades se rozaran me sentí en el jodido paraíso, Mads comenzó a moverse sobre mí, ambas sintiendo nuestras humedades.

<<Mierda, se mueve tan bien.>>

<<Y se ve bastante sexy arriba de mí.>>

Gemidos y gritos salían de ambas, Madelaine empezó a moverse más rápido, olas de placer invadieron todo mi cuerpo, el sonido de nuestras pieles chocando, y en segundos yo también me corrí. 

Después de terminar se acostó a mi lado y rápidamente me abrazo, colocó su cabeza en mi pecho y comencé a acariciar su cabello.

—Te amo—hablé.

—Yo también te amo, ojos grises—eso me hizo sonreír, dejé un último beso en su cabeza para cerrar los ojos y en minutos quedarme dormida.

-

—Ya levántate, ______—comento suplicante mientras tironeaba de mi brazo.

—Déjame dormir—con mi mano libre agarre la almohada a mi lado y se la lancé.

—Au,—se quejo dramáticamente, entre abrí mis ojos para verla desnuda.

—Que linda vista—mencioné.

El color carmesí se adorno en sus mejillas.

Me acomodé mejor quedando sentada en una orilla de la cama.

—¿Qué pasa?—inquirí.

—Quiero que me acompañes a mi departamento, tengo que ponerme ropa limpia, hoy tengo que reunirme con Scott y explicarle lo de Henry/Derek, y haré una mini rueda de prensa—artículo.

—¡Ahg! Que aburrido—me queje, la tome de la cintura y la acerque a mí,—Pensé que pasaríamos el día juntas.

—Lo pasaremos juntas—fruncí las cejas—Desayunaremos, me llevaras a casa, iremos a hablar con Scott y lo más importante la rueda de prensa, hablaré lo de mi secuestro y de—sonrió—Nosotras.