Una cálida luz mañanera azota contra la ventana de un pequeño peliverde, el cual dormía enrollado entre sus sábanas, aunque su descanso no duraría mucho, ya que su madre entró para despertarlo para ir a su primer día de escuela en una escuela nueva.
Inko: Izu, Izuku despierta - le decía su madre acariciando los cabellos que sobresalían de las sábanas.
Izuku: Mmh?, ya voy mami - decía el peliverde saliendo con gran pereza de las sábanas que lo cubrían.
Inko: Apúrate, tu papi y yo te estamos esperando abajo - le dijo dulcemente a su hijo en el oído para después retirarse de la habitación.
Izuku: Voy - decia el chico adormilado yendo al baño para alistarse.
El chico al terminar de prepararse bajó a la cocina para empezar su día con el rico desayuno de su madre.
Tomura: Buenos días cariño - le dijo su padre al pequeño peliverde que bajaba las escaleras.
Izuku: Buenos días papi - le dijo el pequeño niño a su pase con una gran sonrisa.
Inko: Izu, ven siéntate a desayunar -
Izuku: Voy mami - dijo el niño yendo a sentarse para que su madre le diera un tazón grande de cereal.
Tomura: Y dime Izu, ya entraste a 6to verdad? -
Izuku: Si papi, aunque la verdad es que me hubiera gustado terminar primaria en mi anterior escuela, pero entiendo que debimos irnos de ahí por su trabajo - dijo el pequeño sonriente.
Tomura: Ay mi niño!, eres una bendición, un ángel - decía el mayor abrazándolo fuerte al niño.
Izuku: Papi, me aprietas -
Tomura: Ay perdón cielo -
Inko: Izu, apurate a desayunar, que tienes que llegar temprano a la escuela -
Izuku: Esta bien - el niño rápidamente se termino su desayuno para después agarrar su mochila - hoy me vas a llevar tu mami? - le pregunto el niño a la mayor la cual con cara triste no sabia como responder.
Inko: A-ah, no mi vida, hoy no podré acompañarte a la escuela, tengo mucho trabajo, pero tu papi te acompañara - dijo la mayor sonriente, pero el menor se podía notar triste, por más que quisiera ocultarlo.
Izuku: A-ah, esta bien mami, será para la siguiente, nos vamos papi? - pregunto el niño sonriente.
Tomura: Si hijo vamos - dijo con una expresión sonriente, pero al voltear a la peliverde, la miró con una expresión de desaprobación.
Ambos salieron de la casa tomados de las manos, al menor se le pasó la tristeza de hace rato y volvió a su actitud animada de siempre.
Tomura: Y dime Izu, estas nervioso? -
Izuku: Un poco, pero espero hacer amigos - dijo el niño sonriente.
Tomura: Ya veo, pero ojo Izuku, debes tener cuidado con quien te juntas, en este mundo hay gente muy mala que te puede hacer daño, más porque eres un doncel, una especie de humano diferente a los demás, y por eso debes cuidarte más - le dijo el mayor a su pequeño solecito verde.
Izuku: Esta bien papi, pero aún no entiendo el echo de ser doncel - dijo el menor a su padre.
Tomura: Pues en sí eres como un niña, pero también eres niño, bueno es que es muy complicado de explicar, otro día será, hoy debes de ir a la escuela - le dijo al peliverde el cual más confundido terminó aceptando.
Izuku: Esta bien, supongo -
Tomura: Ah mira de echo ya llegamos - dijo apuntando a la escuela que estaba frente a ellos.