Impulsos parte 1: Donde todo comenzó.
Mary.
Tengo un auto, uno negro. Mi madre reunió el dinero necesario para comprarlo y darmelo en mi graduación de Hyakkaou. Mi padre todas las tardes cuando llegaba del trabajo era mi maestro, aprendí a conducir en cuestión de semanas. Es de noche, mi padre no llega y mi madre está preocupada, sentada en el sofá sostiene su teléfono y hace llamadas cada cinco minutos, nadie contesta. Se acerca la media noche, mi madre no sabe que la miro desde las escaleras, me preocupa, está enferma. En estos momentos estoy enojada con papá. El sonido de las llaves se escucha cerca, mi madre se levanta y abre, ha llegado. Tambaleándose entra a la casa, parece que llora.
En un abrir y cerrar de ojos, me encuentro en el asiento del conductor, mi madre está en el copiloto y estoy conduciendo en medio de la oscuridad, este no es mi auto, las luces apenas me permiten ver con claridad, conozco la carretera pero es imposible determinar la proximidad en las curvas. Mi madre tiene un ataque y no sé cómo responder a eso, pierdo el control al volante saliendome del camino, con una mano sujeto mi cabeza y la otra la uso para proteger a mamá. Los cristales penetran mis manos, mis brazos, mi abdomen, mi pecho, sostengo mi cabeza con fuerza y evito golpearme contra el volante. Es inútil, mi esfuerzo de protegernos es tan poco.
Despierto. Abro los ojos y mi sueño se desvanece ¿Cuánto tiempo estuve dormida? Trato de no olvidar los detalles. La habitación está oscura y hay alguien durmiendo a mi lado, es imposible, lo he olvidado, pienso. Me doy la vuelta para encontrarme con su rostro, me mira con ojos penetrantes, me causa un ligero temor.
—¿Qué sucede?— dice acariciando mi rostro.
Cierro los ojos y me permito sentir su mano, está fría, me sobresalto un poco. "¿Puedo?" Digo en voz baja, ella responde de inmediato y luego coloco mi mano sobre la suya, atraigo su cuerpo al mío, ella rodea sus brazos en mi cuello y me da un beso en la frente.
—¿Me dirás qué te ocurre?— dice amenazante. Le sonrio.
—No es nada, solo tuve un sueño extraño.
Me mira indescifrable, pasa sus manos por mis mejillas y siento un ligero cosquilleo ¿Qué hora es? Se levanta de la cama y comienza a cambiar su ropa, decido quedarme un poco más y observo lo que hace.
He tenido el mismo sueño durante varios años y siempre termina en el mismo lugar, en el mismo momento. La única diferencia son mis emociones. En ocasiones estoy asustada, otras veces triste, abrumada, ansiosa, furiosa, siento que el corazón en cualquier momento podría salirse de mi pecho, siento inmensas ganas de gritar, siento que me ahoga ¿Es esto alguna clase de castigo? Me cuestiono a menudo.
—Chun...— le hablo en un hilo de voz. —No lo entiendo ¿Qué son todas estas sensaciones? Siento que podría volcar un auto solo con mis manos pero de repente, me siento débil.
Ella ha desaparecido de la habitación, me siento en la cama y con la mirada la busco, se ha movido tan rápido que apenas pudo hacer ruido, que chica tan molesta. La llamo dos veces hasta que sale del baño.
—Oh ¿Dijiste algo? No pude escucharte.
Bufo, le pongo mala cara y arrugo la frente, prefiero no repetirlo.
—No es nada...— miento.
Está vez mi corazon late con frenesí, evito las lágrimas y miro al techo buscando confort, nada. Aunque de repente llega una idea a mi cabeza, mi sueño a sido la clave, la idea ha estado almacenada y hoy más que nunca por fin salió a darse un paseo. He estado lejos durante mucho tiempo y talvez sea buena idea regresar a pasar un tiempo ahí, debería servir para despejar mi mente y alejarme de todo el caos que he creado. Aún tengo el remordimiento en mi corazón, sin embargo lo deseo.
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Contigo siempre estaré
FanfictionRirika encontró su identidad al estar junto a Mary mientras estaban en Hyakkaou, ahora será el turno de Mary al recordarla. Dos reencuentros, otra oportunidad y un nuevo amor. Que las apariencias no te engañen.