「 XXXI 」

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⚘ Le doy demasiadas vueltas ⚘

—¿Qué mierdas quieres? —La voz de Dabi se agravó hasta llegar a la liga, metiéndose en uno de los cuartos rápidamente y apoyándose en una de las paredes con rabia.

—Oh ¿Tanto te afectó lo que te dije la última vez? —Shigaraki se burlaba a través del teléfono —Solo quería avisarte de que mañana necesitaré ir a la liga a por las últimas cosas que me pidió el viejo, así que de paso esta vez te necesitaré yo a ti— Dabi apretó el teléfono, golpeado levemente la pared a su espalda con el puño.

—¿Qué? —Intentó hacerse el tonto, claramente Shigaraki acumulaba estrés.

—No seas idiota, estoy hablando de sexo y lo sabes. Has sido muy brusco las últimas veces así que ahora me toca a mi.

—Ni de coña— Se negó el mayor, estirándose ahora y caminando por la habitación mientras posaba la uña de su dedo pulgar en los labios, conteniendo ciertos nervios que no quiso sentir.

—¿Cómo que no? ¿Encontraste ya a otro mejor que yo o pasaste solo una noche entre mujeres lujuriosas? —Dabi dió un resoplido, escuchando a Shigaraki reir por creer que solo era algo pasajero —Escúchame niñato, ya he tenido suficiente contigo, esto es un trato y mando yo, así que ahora cargas con ello te guste o no.

Dabi paró un poco sobresaltado por la ira y nervios, el rostro que acababa de ver en Hawks traspasó su mente como una lanza.

Aquellas mejillas rojizas, esos ojos entrecerrados pero serios y sus labios entreabiertos hizo que el mayor pasase una de sus manos por su rostro, frotando sus ojos a muestra de querer disuadir aquel reciente recuerdo.

—¿Y qué pasa si quisiera romperlo? —Le propuso, pues realmente Dabi sintió la gran necesidad de dejar de hacer eso y Hawks solo le hacía confundirse más, pero sentía que debía de parar todo y solo pensar en lo ocurrido.

Un bufido se escuchó en respuesta.

—¿Cómo? —Preguntó amenazante —No deberías de romper algo así conmigo, Dabi —Agravó su voz ahora, aunque Dabi ya le había escuchado así, volviéndose inmune a esas amenazas.

—Pues quiero hacerlo, justo ahora y si no te contentas con eso tienes a toda una liga con la que poder follar, pero conmigo no cuentes— Expresó aquello decidido, consiguiendo una risa falsa del pelo ceniza.

—No me jodas Dabi, ¿Entonces sí encontraste a un imbécil "mejor" con el que satisfacerte? Te arrepentirás de esto, idiota.

—No encontré a nadie, solo quiero dejar esta mierda ¿De acuerdo? — Formuló de nuevo más molesto —Nuestro acuerdo se basaba en hacerlo si estábamos de acuerdo los dos.

—¿Sabes que? Hablaremos mejor mañana sobre esto— Ahora el estrés acumulado de Shigaraki solo le sentaba peor que antes, soltando más bufidos y creyendo que Dabi solo tenía un día de adolescente de 15 años.

—No hay nada de lo que hablar, Shigaraki—Rió ahora irónico y por lo bajo con un ligero toque de molestia, notando como el otro simplemente colgó tras esto y Dabi guardó su teléfono sin mucha importancia.

Quedó mirando a la pared bobamente mientras divagaba en sus pensamientos, con las manos en sus bolsillos mientras oía su propia respiración.

Simplemente no podía creer lo que acababa de pasar.

Hawks, Hawks, Hawks...

"Keigo..."

Eso era lo único que rondaba por su cabeza.

Blinded by childhood, friendship and love Donde viven las historias. Descúbrelo ahora