Texto 1: E l e s p a c i o
La verdad es que escribir en tercera persona me suena demasiado lejano,
Uno que está de por sí –ya entrando en confianza- demasiado ausente de su propio cuerpo.
Viviendo otros espacios, otros ayeres.
Y luego a escribir de un punto más lejano, como si no fuera suficiente mi falta de presente.
La verdad es que la tercera persona suena a una voz añadida en mi cabeza,
Una que me cuenta de mis propios pasos y que siempre busco callar.
Pero el punto no es ese. La verdad el punto era el viaje.
Y el viaje no es sobre mí, es sobre el espacio sobre el que ando.