~Mundos Distintos Mismo Sentimiento~ [Jotakak]

☆ El reencuentro de los amantes

Habían ya pasado tres semanas desde que comencé con estas clases, logre acoplarme a su ritmo de trabajo y al compartir tiempo con el profesor Brando nos fuimos haciendo un poco más cercanos, no lo suficiente como para considerarlo un amigo, pero él depositaba su confianza en mí, logrando que yo también me sintiera seguro, en algunos momentos...

El sonido de las cigarras era tan característico del verano en Japón, como también lo eran sus altas temperaturas, tengo que agradecerles a mis padres por que tengamos aire acondicionado en casa o si no yo ya me hubiera cocinado al vapor desde hace ya tiempo. Me sigo preguntando ¿Cómo es que el profesor Brando soporta este calor? más porque es de origen británico, tendría más sentido que aguantara las temperaturas bajas.

Él es tan...inusual.

- Pro-profesor Brando ¿no tiene calor? - me atreví a preguntar al verlo tan fresco leyendo uno de sus libros.

- No - contestó sin despegar la mirada de su lectura - Lo que puedo notar es que no soportas estas temperaturas -

- No tanto, el verano es mi estación menos preferida por esto -

- Mmm ya veo ¿Cómo vas con la actividad? -

- Eh...ah ya la terminé -

Cerro su libro para tomar la hoja y revisa o más bien inspeccionar mi trabajo

- Has mejorado notablemente, Noriaki-kun - volteo a verme con una notable sonrisa - Solo necesitabas invertir más tiempo en estudiar. Eres muy inteligente, sí sigues así yo podría conseguirte un lugar de intercambio en una buena universidad -

- No lo sé... realmente no tengo tantos deseos de irme a otro lugar - me rasque la nuca en señal de vergüenza

- Por favor Nori-kun, hazlo, esto te proporcionara grandes oportunidades en la vida y yo, Dio, puedo ayudarte a llegar lejos - tomo mis manos para convencerme - No te arrepentirás, te lo aseguro - dijo relamiéndose los labios

Ambos nos quedamos callados con ese acercamiento. Soltó mis manos para arreglar el material de trabajo, cuando de repente mi padre apareció.

- Noriaki hijo, saldré un rato - dijo acomodando su traje a la vez que mantenía su celular pegado al oído - Si tu madre pregunta dile que tengo que arreglar algunos asuntos del... trabajo, con su permiso profesor Brando - hizo una reverencia para después salir y escuchar la puerta de la casa cerrarse.

Ambos nos quedamos solos en la sala, escuchando solamente las cigarras y el tic tac del reloj. Seguía mirándome con tanta atención, podía percibir una tensión entre los dos, pero no encontraba una manera de romperla; su risa volvió a captar mi atención, a la vez que se recargaba en el respaldo del sillón y extendía su brazo.

- Nori Nori Nori - volvía a reír juguetonamente

- En verdad eres como una flor de loto creciendo en un pantano - se tomó la libertad de pasar su mano por mi cabello, para tomar un mechón de este y verlo entre sus dedos.