Triste realidad. (Disnea Mágica) |Nalu|

El Portal de la felicidad.

¡Enjoy!

Restregue mis manos a mi cara para sentir el agua resbalar de mi frente hasta la punta de mi mandíbula.
Levante mi mirada al espejo y mire mi cara.

No podía evitar pensar en Lucy.

A pesar de que parecía estar mucho mejor, esto no es así.
Ya casi no puede moverse, porque sus pulmones no están funcionando correctamente. Caminar se ha vuelto algo complicado para ella, así que el médico la ha obligado a tener algo de dependencia.

Yo mismo me ofrecí a dejarle vivir en mi casa.
Ya lleva una semana aquí, y por suerte parece ser que poco a poco por fin consigue adaptarse...Por algún momento, pienso en que si viviera eternamente aquí, no me importaría, pero por otras veces pienso que es injusto para Lucy.

¿Qué debo pensar? ¿Cómo tengo que tratarle? No tengo ni idea de cómo ser realmente con ella... Lo único que sé es que no quiero que sufra más.

Gray cerró los ojos mientras un largo suspiro salía de sus labios.
Todo lo que había pensado era verdad.
Lucy había empeorado, Natsu no estaba y Lucy necesitaba cierta dependencia. Así que todos habían llegado a la  conclusión de que se quedara en casa de Gray.

Así que ahí estaban los dos, viviendo juntos, y a pesar de que se le había hecho algo raro al principio, tenía que admitir que vivir con Lucy era muy agradable.

Lucy en sí era muy agradable.

Se reincorporó y fue hasta donde estaba su amiga sentado, quien aún no había probado bocado de su comida.
Gray refunfuñó. ¿Realmente su comida era tan mala?

-"Lucy, tienes que comer".-Advirtió Gray, mientras miraba a su amiga, quien estaba sentada.

-"No tengo hambre".-Murmuró seriamente y Gray miró su plato.

De la sopa, el arroz y la carne, lo único que faltaba era la mitad del cuenco de arroz.

-"¿Quieres que te traiga otra cosa para comer? ¿Algo de Mira, por ejemplo?"-Preguntó, mientras que Lucy solo negó con su cabeza.

-"No gracias...No es por tu comida, solo que no tengo hambre".-Volvió a explicar, mientras miraba hacia otro lado.
Gray suspiró derrotado. Era como tratar con una niña. Pero una niña enferma.

-"Bueno... Pero prométeme que esta noche cenarás algo".-Comentó mientras se levantaba y Lucy asintió. El mago simplemente se puso a limpiar lo poco que había ensuciado, y Lucy solo se quedó mirándole.

-"Gray..."

-"¿Sí?"

-"¿Por qué estás haciendo todo esto por mí?"-Preguntó, con voz rota.

Gray se sorprendió, pero después le sonrió, mientras la miraba directamente.-"Porque eres mi amiga. Tú has hecho muchas cosas por mí, Lucy. Realmente mereces que haga esto por ti".-Explicó sonriéndole, mientras acariciaba el cabello de su amiga.

-"¿Puedo hacerte otra pregunta?"-Gray asintió.-"Gray... ¿Por qué aún sigo viva?"-Cuestionó, mientras miraba al mago de hielo sin ninguna expresión.
Gray se quedó a cuadros.-"Quiero decir... Yo ya no puedo hacer nada... Necesito ayuda para todo... Si es seguro que no voy a vivir... ¿Por qué aún estoy viviendo?"

Gray se quedó demasiado sorprendido por dos razones.

La primera de ellas era porque en ningún momento Lucy había mencionado la palabra ' muerte '.

La segunda razón fue porque la pregunta de Lucy parecía la pregunta inocente de una niña, sin embargo llevaba la amargura y el dolor de un adulto.