Lo aprendí de ti
-Vamos Serena- apuró una bella pelinegra a su amiga
-Ya, ya… se me hizo tarde- se disculpó Serena
Ambas corrieron para llegar a tiempo a la primera clase, sin darse cuenta Serena chocó con alguien cayendo al suelo, cuando levantó la mirada quedo prendida en esos ojos violetas.
“Te conocí un día de abril, un día común
El día que menos lo esperaba
Yo no pensaba en el amor, ni lo creía
Y mucho menos lo buscaba”
-Disculpa hermosa- se disculpó dándole la mano para ayudarla a levantarse
-N..no te preocupes, la culpa fue mía por no fijarme- dijo una ruborizada Serena, agarrando la mano de aquel chico
-Diamante, no encuentro a mí hermana, parece que hoy no viene- se escuchó que decían
Serena reconoció esa voz, ¡era su hermano!. Hace dos años, que no lo veía, desde que él había tomado la decisión de ir a estudiar abogacía a otra ciudad.
-¿Haruka?- preguntó Serena con cautela
-¿Serena?- se acercó este para ver que en verdad era su hermanita
Ambos se fundieron en un abrazó bajo la atenta mirada de Diamante, que no podía dejar de observarla.
-¿Cuando regresaste?- preguntó Serena feliz
-Acabo de llegar- respondió contento sin dejar de abrazarla
-¿No me vas a presentar?- preguntó de pronto Diamante
-Sí perdón, te presento a Serena, mi hermana-
-Mucho gusto Serena, soy Diamante- se presentó el peliplata
Serena se ruborizó, no creía en el amor hasta ese entonces, pero al verlo, quedó flechada, su corazón latía a mil por hora, y sentía mariposas en su estómago.
Decidió no ir a clases, se despidió de Rei y se fue con Haruka, cuándo llegaron a la casa entró ella primero
-Padres- llamó Serena
-¿Que pasó Sere?- preguntó Serenity saliendo de la cocina
La rubia dio un paso al costado dejando pasar a su hermano, Serenity corrió a abrazarlo, lo extrañaba.
Después de las presentaciones y ponerse al día, de lo que habían hecho en ese tiempo que no se vieron,Serena subió a su habitación, todo el tiempo sintió la mirada de Diamante en ella, y eso la inquietaba.
En la noche Apolo ofreció a su hijo y Diamante trabajar en su bufete de abogados, al principio trataron de negarse, sobre todo Haruka que quería sobresalir por sus esfuerzos y no por ser el hijo de unos de los abogados más reconocidos del país, pero fue tanta la insistencia que terminaron aceptando.
El tiempo pasó y la atracción entre Serena y Diamante cada vez era más fuerte, cosa que preocupaba a Haruka, temía que su amigo solo jugara con su hermana, no sólo por la diferencia de edad, sabía la fama de mujeriego que tenía este, aunque desde que habían llegado ahí, no lo había visto coquetear con ninguna mujer.
“Y de pronto apareciste tú
Destrozando paredes e ideas te volviste mi luz”
Serena no se podía concentrar en la clase, todos sus pensamientos eran para ese peliplata que había llegado para darle luz a su vida, cada día se sentía más enamorada de él, ya no quería sólo ser su amiga.
“Yo no sabía que con un beso
Se podría parar el tiempo y lo aprendí de ti
Ni que con solo una mirada
Dominaras cada espacio que hay dentro de mí
Tampoco sabía que podía amarte tanto
Hasta entregarme y ser presa de tus labios
Descubrí que sí
Porque lo aprendí de ti”
