Peligro

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Kirin estaba con el brazo doblado mientras presionaba la motita de algodón bañada en alcohol que Yoshimura le había puesto después de una toma de sangre para los análisis que debía realizarse. Se encontraba sentada en el consultorio principal, solamente acompañada de Richard mientras tomaba notas.

—Fui a entregarla —dijo el doctor entrando—. Estarán en un par de días porque ahora urgen los resultados de Kaoru. Tengo fecha límite. ¿Cómo te sientes?

—Estoy bien. No me he sentido tan mal estos días.

—Subiste algo de peso desde hace una semana que te revisé. Por lo que sé, no has cambiado de alimentación, ¿verdad?

—Para nada. ¿Fue mucho lo que engordé?

—No engordaste, Kirin. Solamente subiste de peso, fueron cuatro kilos esta vez. Eres una mujer bastante alta, en realidad ese aumento ni siquiera se nota.

Daisuke entró al consultorio sin previo aviso. No le gustaba dejar a Kirin sola cuando tenía sus revisiones periódicas, pero en esta ocasión él estaba atendiendo la pronta demanda que podrían autolanzarse para llevar a juicio el caso de Kaoru.

— ¿Cómo te sientes? —preguntó él acercándose a su esposa.

—Estoy bien. ¿Y Kaoru?

—Está durmiendo en su habitación. Me dijo que se sentía muy cansado.

Yoshimura suspiró. Últimamente las feromonas de Kaoru estaban demasiado alteradas a un nivel preocupante. Se habían vuelto más fuertes, pero ello también significaba que eran cada vez más difíciles de controlar. Todavía no quería sacar conclusiones, pero estaba casi seguro de que su rut ya estaba empezando, y eso solamente significaba una cosa, una muy triste y dolorosa para el adolescente.

— ¿Por qué esa cara? —le preguntó Daisuke.

—Por nada. ¿Ya terminaron de organizar los documentos de la demanda?

—Ya falta poco. Necesitamos algo que compruebe que Kaoru "no está bien" para que le permitan legalmente la inscripción al instituto de Kirin.

—No será difícil —respondió con seguridad—. Tengo algo que mostrarles.

El doctor sacó algo del cajón de su escritorio. Era un botecito de píldoras que agitó con singular alegría.

—Primero necesito probar esto —dijo.

— ¿Qué es? —preguntó Daisuke.

—Bueno, Kaoru tiene problemas para regular su ciclo de sueño. Los del laboratorio estuvieron trabajando en un medicamento exclusivo para él que podría ayudarle a regularlo. No podemos arriesgarlo a enviarlo afuera, aunque sea a una escuela, sin saber si podría quedarse dormido de la nada.

—Entonces los problemas de sueño y la medicación podrían servir como comprobante, ¿no es así? —preguntó Kirin.

—Así es. Soy médico, no me será nada difícil hacerlo pasar como narcolépsico.

Los padres del adolescente se pusieron felices de inmediato. Cada vez, lentamente, lograban dar un paso más hacia la liberación de su hijo.

*

—Señor —llamó el ayudante—. Hemos detectado que el joven Sakurayashiki ha fortalecido en un veinte porciento sus feromonas desde la revisión pasada.

El hombre tomó el líquido restante de su copa de vino de un jalón, haciendo una mueca al terminar de tragarlo.

—Eso quiere decir que la bestia quiere aparearse —respondió—. Perfecto. No hará mal hacerle una visita.

Proyecto Sakurayashiki || OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora