CAPITULO 37

534 38 15
                                    


DESPUES DE LA HISTORIA



CAPITULO 37



― Serena... ven aquí... ―la figura le sonreía, de aquella manera desagradable mientras se le acercaba―. Tu eres mi favorita, a pesar de la oscuridad que encontramos dentro tuyo... ven... yo haré que esta oscuridad desaparezca...

Por más que corría y forcejeaba, aquella figura siempre terminaba atrapándola.

Era un infierno.

Un infierno que debía cargar sola.

Gritaba.

Gritaba al grado de desgarrarse la voz, pero no recibía respuesta alguna.

Nadie la escuchaba.

Nadie podía ver el sufrimiento que la consumía.

Aquella oscuridad la consumía cada vez más, al grado de que terminó acostumbrándose a ella.

Fue entonces que ella apareció.

Le demostró que no tenia por qué vivir así.

Que ella era fuerte, al grado que era su deber guiar a otros, a salir de la oscuridad que tan bien conocía.

Si... ella era la elegida.

Y debía cambiar el mundo, así tuviese que sacrificar a las personas necesarias en el camino.

Así ella misma saldría de la oscuridad y se convertiría en la luz que guiaría al mundo.

Abrió los ojos de golpe.

Había vuelto a tener el mismo sueño sufrible.

Aun con cierto malestar, se estiró en la cama a modo de relajarse, ya que su día estaba a punto de empezar.

Tocaron a su puerta a los minutos, justo cuando terminaba de ponerse su túnica.

― Mi señora, le traigo su desayuno ―expresó una de sus siervas con hábito oscuro y vista agachada, pasando adentro, con un carrito donde se encontraba una charola tapada―. Por favor, sírvase.

― Te lo agradezco ―respondió la rubia, sentándose en su mesita frente al ventanal de su habitación, que le daba una vista hermosa del jardín interno del edificio.

― Los superiores también me dieron esto ―agregó la sierva, extendiendo un pequeño folio sellado que sacó de su túnica―. Dicen que es de suma importancia que usted lo lea, para luego darles órdenes.

Rika aceptó el documento.

Abriéndolo, se encontró con una extensa hoja.

Al parecer, los espías habían tenido grandes avances en su trabajo.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

No lo mencionaba, pero su llegada había sido un gran alivio en cada estresante día.

―Jaehee, hoy tuviste suerte, repitieron en hacer, la ensalada que te gusta...

Ese era Yoosung, que, a diferencia de ella, podía salir a horario a almorzar en la cafetería del edificio, y se tomaba la molestia de traerle su almuerzo.

Ya hasta había memorizado sus gustos.

Usualmente, le dejaba su bandeja y se iba a comer a otro lado, pero al descubrir que ese otro lado no era mas que las gradas de las escaleras de emergencia, lo invitó a comer en su oficina.

DESPUÉS DE LA HISTORIA (YOOSUNG X MC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora