El Heredero De Drácula

𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 47

Después de regresar a nuestro mundo por el portal de Merlin fuimos directamente a buscar a Van Helsing ya qué tenía qué estar enterado de todo lo qué estaba pasando. En cuánto llegamos a la oficina él nos comenzó a hacer un montón de preguntas, nos dijo qué habíamos desaparecido por dos días.

—No entiendo nada, ¿Dicen qué estamos en peligro por culpa de la reina malvada de Blancanieves? — Hablo el ex cazador algo confundido.

—Sí, eso mismo, ella nos envió a su mundo por qué representabamos un estorbo para su plan de dominar la magia de esté mundo — Le responde José.

—Pero, ¿Cómo?, se supone qué es un personaje de cuento de hadas.

—Es un espejo, solo qué más evolucionado qué el resto — Dijo Cordelia —.Ella está aquí por mí culpa, yo la cree cómo homenaje al cuento qué mí abuela me contaba de niña.

—No es tú culpa, Cordelia ya deja de decir esas estupideces tú no sabías qué un espejo podría llegar a hacer esto — Le dijo el ángel de la sabiduría.

Definitivamente algo está pasando entre estos dos, antes se odiaban a muerte y ahora veo qué no es así.

—¿Saben en dónde puede estar? — Pregunta Van Helsing.

—No...— Negué —.Pero presiento qué está aquí en los terrenos de la escuela, ya qué la biblioteca alberga un montón de libros de hechizos ideales para ella.

—Muy bien, mantendré a los guardias cerca de la zona de la biblioteca las 24 horas del día, mientras la encontramos no hay qué alarmar a los demás estudiantes, hay qué actuar lo más normal qué se pueda.

—Estoy de acuerdo, hay qué buscarla pero sin llamar la atención de los demás estudiantes — Comenté.

Van Helsing y los demás asintieron.

—Vayan a sus dormitorios, es tarde ya, mañana comenzaremos a buscar a esa tal reina Ingrid — Nos ordena el director.

Al día siguiente

Había amanecido ya y para no levantar sospechas reanudamos nuestras clases, claro eso sin dejar de estar alertas en todo momento por sí su majestad decide aparecer para jugar.

—Sangre O negativo por favor — Pedí una vez llegué al mostrador de la cafetería de la plaza A.

La chica asintió y fue por mí orden.

—Necesito hablar contigo — La voz de Lucifer sonó a mis espaldas.

—¿Ya se te pasó el enojo? — Ni siquiera me gire para verlo —.Ayer estabas muy enojado, hasta dijiste qué no nos ibas a ayudar.

—Eso fue ayer, hoy es hoy.

—No tengo tiempo, tengo clase dentro de unos minutos.

—¿Ahora tú vas a actuar así?, ¿En serio Bastián?

—Yo no comencé.

—Ingrid fue a verme.

Al escuchar el nombre de la reina rápidamente me gire para ver al príncipe del infierno.

—¿Qué?, ¿Cómo qué fue a verte?

—Ella quiere qué le enseñe a dominar la magia de esté mundo.