Nathaniel empieza a sentir que su relación no durará mucho más por culpa sus inseguridades y está dispuesto a terminar con todo para que ella sea feliz. Pero cuando está cerca de cumplirlo, se dará cuenta de que no quiere dejarla ir...
Tras haber realizado el último trazo sobre el lienzo y examinar a detalle los últimos retoques que dio a su pintura, Kagami finalmente sonrió satisfecha por su reciente obra. Estaba muy orgullosa de sí misma, si bien el cuadro no alcanzaba la perfección que tenían las creaciones de su novio o sus artistas favoritos, si lograba marcar una notable mejoría en su técnica, y eso la alegraba de sobremanera.
Limpió la pintura del pincel en el vaso de vidrio que tenía al lado de sus materiales y lo colocó junto a los otros recientemente aseados para que se secaran antes de guardarlos. Se acercó al aparato de sonido para cambiar la estación de música clásica por una moderna. Su trabajo estaba hecho y vendría bien un ambiente más animado y rítmico para acompañarla mientras limpiaba su desorden.
Debía darse prisa, Nathaniel saldría pronto de su trabajo y quería que todo estuviera en perfecto orden cuando le mostrará su cuadro terminado. Desde que su novio se había convertido en su mentor en el arte, Kagami siempre se esforzaba en poner todo su empeño en aprender e imitar todo lo que el pelirrojo le enseñaba, desde simples dibujos a lápiz en su libreta hasta complejos cuadros con pintura o acuarelas sobre un lienzo. Le gustaba impresionarlo, por eso siempre procuraba que todas sus obras y ejercicios quedarán perfectos.
A Kagami siempre se le dio muy bien el arte, dibujaba en sus esporádicos periodos libres. Pero al ser una práctica que disgustaba por completo a su madre, nunca pudo llevarlo al siguiente nivel. Esto cambió cuando los caminos de la azabache y el pelirrojo se cruzaron por casualidad, Nathaniel siempre desarrollaba cierto interés en los posibles artistas y cuando se dio cuenta que él y Kagami compartían la misma pasión por el dibujo, quiso ofrecerse como maestro para enseñarle todas las técnicas que él conocía. Pero el chico siempre fue algo tímido y le aterrba acercarse y ser rechazado por la fria chica, pero con ayuda de Marinette, una de sus amigas más cercanas quien también mantenía amistad con Kagami, lo ayudó a acercarse con paseos y reuniones que organizaba con frecuencia, fue de esta manera como Kagami y Nathaniel se fueron acercando hasta que el chico pudo convertirse en su maestro.
Esto conmovió el corazón de la joven japonesa, que desde la primera clase puso toda su dedicación en aprender, sorprendiendo al pelirrojo con su habilidad natural. Pasaban casi todas las tardes juntos, después de los entrenamientos de esgrima de la azabache. Poco a poco, las clases que únicamente se trataban sobre arte y sus diversas ramas, se convertían en charlas mas casuales en donde compartían sus gustos, vivencias y lo que habian hecho durante el día, gracias a esa costumbre fue como pudieron conocerse cada vez más. Fue cuestión de tiempo para que despertarán sentimientos el uno por el otro.
Una tarde, Nathaniel logró reunir el valor suficiente y le confesó sus sentimientos. Tartamudeando y con un leve temblor en su cuerpo le propuso a Kagami intentar tener una relación como pareja.
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La Vie en Rouge | One-shot | Nathaniel x Kagami
FanfictionNathaniel empieza a sentir que su relación no durará mucho más por culpa sus inseguridades y está dispuesto a terminar con todo para que ella sea feliz. Pero cuando esta cerca de cumplirlo se dará cuenta de que no quiere dejarla ir. -Eres maravillo...