Capítulo 13

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Madeleine Crovetto
Montecarlo, Mónaco.

El fin de semana fue tan caótico que simplemente me olvidé de la carrera, apenas había visto algunas noticas en la página de Fórmula 1.

Mi padre comenzó a pedirnos más ayuda en cuestión del hotel, las vacaciones de diciembre se acercaban y teníamos que estar al pendiente de todas las cosas que se solicitarán en el hotel.
Por una parte, estaba muy feliz de ayudar a mi padre, pero por otra me daba un poco de miedo. Él es tan perfeccionista que cualquier cosa que no le guste nos hace repetirlo miles de veces más.

—Si papá me vuelve a pedir un reporte de las toallas de la habitación juro que me mudo de país.

Bella también estaba involucrada en esto, le encantaba hacer muchas cosas y entre esas esta ayudar. Solo que con mi padre no era tanta la ayuda.

—Será mejor que te mudes de país.

—Ganas no me faltan — Se rio Bella — Pero amo Mónaco y creo que no lo cambiaria por nada.

—Ni por el holandés guapo.

—¡Cállate y retráctate!.

—Las dos sabemos que mueres por Max.

—Tú también mueres por Sergio.

—Pero yo si lo admito.

—Max solo fue una noche o tal vez dos y no más.

—Si lo que digas.

Aunque bella insistía en que Max solo para una noche yo sabía que no, tanto Max se emocionaba al verla como ella a él.

Las dos seguimos encerradas en el despacho de papá haciendo todos los informes necesarios y también discutiendo sobre los ingresos del hotel. Mi padre siempre se empeñó en crear un pequeño imperio de hoteles, pero a veces me preguntaba porque no lo hacía sin embargo ahora me doy cuenta por qué.
Aunque Mónaco es un país que no pagas impuestos, el precio y la estancia es muy cara. Mi padre suele pagar mucho por parte de los servicios del hotel y entiendo que, aunque nosotras ya estamos grandes mi padre aún se hace cargo de la casa. Para el seguimos siendo sus niñas.

—Necesito descansar, me duelen los ojos.

Bella se tiro en la alfombra de la esquina del librero.

—Ya casi acabas, mejor termina y después vamos a comprar helado.

—Pido que el helado sea de chocomenta.

Antes de que pudiera protestar se levantó en busca de terminar el informe, ya no nos falta mucho por terminar así que el helado será la mejor recompensa.

.

—¿Qué crees que pase después de que nos casemos?

—Yo no me quiero casar — Comentó.

—Pero algún día va a suceder y papá se quedará solo.

—Si es que me llegó a casar — Susurro bella — Me vendré a vivir con papá, él es lo único que tenemos y nosotras somos lo único que tiene.

.

1 de octubre

A veces solía hablar con Checo por teléfono, el seguía en Londres viendo algunos asuntos de la fábrica de Red Bull. Mientras que yo seguía en los asuntos del hotel y concentrándome en la presentación de baile que cada vez estaba más cerca.

𝐌ó𝐧𝐚𝐜𝐨 | 𝐒𝐞𝐫𝐠𝐢𝐨 𝐏é𝐫𝐞𝐳 |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora