♡♤ Inseguridad Del Corazón ♤♡ (Rodorah)

Todo fin va a regresar

(Antes de comenzar esta historia. Olvidé mencionar que esta historia los personajes son mitad humanos, con las características exactas de los titanes y si  van a vivir en sus respectivos hatitads y obviamente son de un tamaño mayor al de los mortales, bueno sin nada más que decir disfruten de la historia)

Oscuridad y más oscuridad... Rodan se despertó de lo que fue un sueño con absolutamente nada en el, solo fue más oscuridad en su cabeza antes de sacudirla y asomarse por el cráter de su volcán... la verdad todo estaba muy tranquilo y en silencio como si la muerte estuviera presente, a allá abajo se podía ver la ciudad humana abandonada, ya solo era vacío y muy silencio el ambiente de dicho lugar.

"Todo en silencio... como siempre..."- incluso Rodan tenia que admitir que este silencio era abrumador y tenebroso en ocasiones, pero al menos no tenía que escuchar lo de siempre de los demás titanes cuando salia para una "visita".

Rodan se levantó y extendió sus alas para emprender vuelo y así salir a cazar definitivamente, ya que últimamente no a estado comiendo correctamente las cantidades necesarias de comida y radiación que necesita para estar saludable. Lo que mas quería en este momento era salir a conseguir su comida y volver antes de toparse con algún titán que le recordara lo que es, un traidor contra todos al aliarse en primer lugar con... ni siquiera quiere recordar ese nombre.

Una ves ya surcando el océano en busca de su comida, se sumergió solo un poco en la profundidad antes de salir del agua con dos ballenas azules y algunos tiburones.

Volando de regreso a su volcán se llevó una tremenda sorpresa al ver a los dos titanes que menos quería ver ...

"¿¡E-eh!? ¡¿Rey, Reina?! ¡¿Q-qué es lo que ha-hacen a-aquí?!"- dijo temblando un poco y sorprendido a la vez.

"Hola Rodan..."- Godzilla lo saludo un poco serio, mirándolo por encima del hombro.

"Hola Rodan, no te asustes, solo venimos a ver como estabas"- Mothra fue más amable en presentarse a el notando que estaba nervioso de su visita.

"P-pu-pues bien"- sonríe nervioso.

Aunque no lo hayan dicho Rodan pudo notar que ambos estaban viendo su estado físico... había perdido mucho peso este último tiempo, les sorprende que aún así pueda volar sin problemas.

"Rodan... se que no quieres molestias... pero no estas en las mejores condiciones de vida últimamente, estas más delgado y eso no es bueno para ti"- dice Mothra preocupada.

"Para nadie lo es"- Godzilla giro la cabeza viéndolo mejor.

"Yo ... yo estoy bien, solo no he podido cazar lo suficiente para alimentarme algunas presas no han estado tan últimamente presentes aquí"- Rodan camina un poco, pero aún mantiene distancia de ellos.

"Entonces solo ve a otro lugar donde puedas encontrar más alimentos"- Godzilla rueda los ojos mientras apunta al océano. Rodan inmediatamente negó con la cabeza.

"La verdad prefiero no salir de mi zona de caza, es bastante... ehhhh... confortable para mí"- dice Rodan tratando de no hacer mucho contacto visual con ellos, diablos, se le estaba haciendo incómoda la situación. Al escuchar el sonido de algo caer delante de el, miro un poco sorprendido al ver algunas presas recién cazadas, las suficientes para que se pueda alimentar por un tiempo.

"¿Y... esto?"

"Mothra tuvo el presentimiento de que necesitabas más comida... y al parecer si la necesitas"- Godzilla miro a su pareja quien asintió con la cabeza.

"Yo-" - antes de que Rodan terminará la palabra.

"Y no hay devoluciones. Necesitas urgente comida Rodan, tu estado físico no es mejor y necesitas recuperarlo"- dice dándole ánimo a Rodan para que dejara de sentirse incómodo.

"Mmm... gracias..."- dice mientras recoge un poco.

Aunque solo fueron unos minutos de visita por parte de los reyes, a Rodan le hizo un poco bien la presencia de ellos, por lo menos no fueron las palabras que escucho durante un tiempo. Mothra con su suave voz y comprensión le hizo sentir un poco mejor, aunque la presencia de Godzilla no haya sido de la misma manera... al menos no se veía tan molesto como siempre al verlo.

Rodan pasó todo el día comiendo un montón hasta que las primeras estrellas ya comenzaban a salir en el cielo y ahora solo se las podía quedar mirando.

Las estrellas en si le traían buenos y malos recuerdos: malos recuerdos, ya que cada vez que las mira recuerda la noche oscura en la que él llegó a la tierra y la pesadilla en el nació... pero no todo era tan oscuro al mirarlas, tenía muchos recuerdos lindos de ellas, uno de los que más le llena el corazón son las noches con su padres, cuando lo  acurrucaban con sus alas y miraban el cielo nocturno mientras sus padres le contaban historias.

"... realmente los extraño mucho..."- una fina lágrima salió del ojo de Rodan al recordar a sus padres, después de unas horas Rodan se acomodó lo mejor que pudo en el su volcán y comenzó a cerrar los ojos poco a poco mientras el sueño lo reclamaba lentamente.

En la oscuridad de su propia mente Rodan no paraba de escuchar susurro de voces conocidas, pero una que mas se repetía era la del falso rey que lo atormento desde el día de su muerte.

"¡Ya larguense! ¡No los quiero escuchar más por favor!..."- Roda  se tapó los oídos.

"Ohhh... pero si extrañamos verte de esa manera Rodan"

"Luces más indefenso de lo que eres"

"Siempre nos haces reír cuando estás así"

"¡Ya paren! ¡Ustedes no son reales, Godzilla los mato!"

"¡No te atrevas a mencionar ese nombre de nuevo!"

Rodan se calló al escucharlo gritar.

"El es débil..."

"Además, tu lo traicionaste al unirte a nosotros..."

"Y ahora estas solo, es lo que mas te mereces... traidor"

Esa última palabra se repitió una y otra vez en su cabeza, provocando que comenzará a llorar y rogando que se detuviera.

"¡Ahhg!... ah... ahh..."- Rodan se despertó de golpe con lágrimas en sus ojos y jadeando sin control sobre sus respiraciones... fue una maldita pesadilla, de todo lo que le pudo haber tocado soñar le tuvo que tocar una maldita pesadilla. Rodan se hizo bolita y comenzó a sollozar sin consuelo mientras el sol comenzaba a salir por el horizonte.

Lejos de la habitación de Rodan, y de cualquier ubicación de algún titán, un laboratorio estaba hecho cenizas mientras una extraña tormenta se formaba por el lugar y en medio del desastre se veían tres siluetas humanoides que a través del espeso humo se podían ver el brillo de sus ojos que eran de un fuerte rojo rubí y al igual que Rodan estos contaban con alas incluidas en sus espaldas, emprendieron el vuelo mientras se creaban más tormentas y dirigiéndose a algún sitio en específico del planeta.