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Como todas las mañanas, Soobin salia de su casa saludaba a la vecina que regaba sus platas y caminaba directo para la universidad, no sin antes pasar por su cafetería favorita y comprarse un americano.

En su andanza siempre pasaba por una tienda de antigüedades, por el gran ventanal se podía apreciar un gran espejo de cuerpo completo, con pequeños detalles dorados y delicado a la vista de cualquiera el cual logro llamar todo su atención.

Decidido con entrar a la tienda, la alarma de su teléfono le indicó que iba tarde a su clase, en el camino se encontró con el revoltoso de su mejor amigo Beomgyu y partieron juntos.

  (●●●)

—Soobin, hey Soobin, Sucede algo?- pregunta Beomgyu- Estás distraído y no estás prestando atención a clase.

—No es nada, solo pensaba en algo- dice restando le importancia.

—En que piensas?- insiste con saber.

—Me acompañas a un lugar después de clases?- evita la pregunta sin decir más.

—Ok pero me compras un helado.

   (●●●)

Después de clase salieron directo para la tienda en la que tanto pensaba Soobin no sin antes pasar por el helado de Beomgyu.

—Ya pero dime donde vamos- seguía insistiendo el rubio

—Ya te compre el helado gyu tu solo sígueme.

Llegaron a la tienda y al entrar Soobin quedo anonadado por la belleza del espejo, si de lejos es hermoso de cerca era perfecto, al estar cerca del nombrado apareció una mujer de unos aproximados 60 años, canosa y con una aura extraña.

—Veo que te interesa el espejo querido- dice acercando a los chicos dándole un poco de miedo a Beomgyu.

—Soo este lugar es raro, esta señora es rara vamonos de aquí porfavor!- susurra en el oído del castaño.

Sin prestarle atención a su mejor amigo siguió caminando hasta poner la palma de su mano en el espejo viéndose detenidamente en el.

—Es muy lindo no crees, se dice que el espejo tiene algo especial en su interior- dice la anciana.

—Ahora resulta que es mágico el espejo- dice rodando los ojos Beom

—Un bonito chico como tu debería de tener un gran espejo como este- prosigue ignorando al desconfiado rubio.

—Usted lo cree?- pregunto el castaño con un peculiar brillo en los ojos.

—Binnie esta mujer te quiere estafar, obvio que te está adulando para que le compres ese espejo viejo.

—Quieres el espejo chico?- dice la anciana mirándolo fijamente.

—realmente me gustaría tenerlo- dice Soobin sin despegar la mirada del espejo

—Sabes- dijo la anciana- es todo tuyo Soobin.

  (●●●)

—Soo ayúdame el espejo es tuyo no mío- dice el rubio intentando subir el espejo por las escaleras.

—Oh Gyu espérame ya te ayudo- dice dirigiéndose hacia las escaleras.

—Todavía no puedo creer que esa anciana te haya regalado el espejo.

—No le digas así y yo tampoco, pero me alegra realmente tenerlo- dice terminando de colocar el espejo en su habitación al lado de la ventana.

—Es hermoso- dice observando el espejo- pero sabes que es más hermoso, yo.

Decidido a ignorar lo dicho, Soobin prosigue con lo que tenía planeado comentar.

—Hoy hay luna llena, lo sabías?- le dice Soobin

—No lo sabía, no hay nada de especial, es solo una luna y ya.

—Las lunas llenas son mis favoritas.














Es mi primera historia, espero le guste a la persona que la esté leyendo ❤️✨

Stream a lo$er=Lover.

Los capítulos serán más largos con el tiempo.

El chico del espejo || YeonbinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora