Un golpe se había escuchado y los gritos de Zenitsu habían parado
La cara de Zenitsu reflejaba miezo, terror; era verdad que había resivido muchos golpes, eh incluso más fuertes que esos, pero jamás de una persona a la que amara, fuera de Inosuke, cuando lo conoció, pero no contaba por qué aún no lo conocía del todo
- Perdoname Zenitsu- Dijo con arrepentimiento Tenge abrazado muy fuerte al rubio
una brisa fresca se sintió y cuando menos se dio cuenta Shinobu ya tenía al pequeño en sus brazos
¡El insecto se lo había quitado!
- Hola Shinobu- dijo sin ganas- me podrías devolver al rubio? - pregunto con una sonrisa
- No, es más, ya nos vamos- y así cómo llegó se fue
- Es la segunda vez que me salvas- Dijo apenado el Agatsuma cuando llegaron a la finca de Shinobu y ya estaba atendiendo su gran moreton
- No te preocupes, es mi trabajo defender a los más débiles- Ajám Ajám- pero en fin, quieres contarme el por qué estaban discutiendo?
- Si pero si tu me dices cómo llegaste a ese lugar a salvarme- respondió
-Esta bien, Aoi escucho tus gritos de auxilio y reconoció tu voz, pero al ver quien te tenía mejor me fue a avisar- Dijo- Te toca
- Si bueno, es una larga historia... - Dijo apenado el rubio
- Ay, no te preocupes, hay tiempo- Respondió con una sonrisa mientras preparaba algodón con alcohol y otras cosas
- Bueno, verá....
