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Teníamos apenas horas de estar casados, me sentía feliz, nuestra relación era como las que pintaba Hollywood, nos conocimos en la preparatoria, nos hicimos mejores amigos, confesamos nuestros sentimientos, nos hicimos novios, nos graduamos, abrimos nuestra propia empresa de héroes y ahora estamos casados...¡Incluso cumplimos los malditos estándares de cualidades contrarias!, el fuego y yo hielo...Somos tan cliché.
—Gracias por hacerme el hombre más feliz del mundo, te amo tanto...—Me beso entrando a la casa de nuestra luna de miel. —Gracias a ti por hacerme la mujer más afortunada del mundo—Nos separamos y el llevo nuestras maletas al cuarto, fueron 3 horas de viaje, todavía teníamos la ropa de la fiesta, el su traje rojo y yo mi vestido blanco, mi increíble amigo me había dicho que para que lo usaba si iba a ser calcinado esa misma noche, lo sabia, rezaba para que se hiciera realidad, de 5 años de relación solo lo habíamos hecho 7 veces...¡Es una mierda eso!.
Llegue al cuarto tratando de que mi exuberantes curvas se notaran más, abrí la puerta dejando ver a un Enji desabrochando su corbata, joder, necesitaba que con esa misma me amarrara y toda la noche me folle como en una película porno. —Me encanta como te queda ese hermoso vestido—Solo pensaba una cosa "¡Deja de decir esas mierdas y romperme el culo, no deje de comer toda mi maldita boda desde la mañana para que digas eso!", literalmente solo deje de comer por 10 horas, la fiesta solo duró 7 horas y empezó ya un poco tarde.
—Gracias cariño...—Por favor Enji mira mi cara suplicante por tu enorme pene. —Te ves un poco desesperada, ¿Estas bien?—Dijo levantándose y tomando mi cabello que ya solo tenía una coleta larga. —Si estoy muy bien—Sonrei falsa, desearía poder decirle cuanto lo necesito dentro de mí. —Entonces te voy a follar como nunca lo hice—Esas palabras me dejaron en shock, estaba erizada y asustada, no creía lo que decía.
Mis labios fueron atacados por sus calientes labios, siempre tan experto como siempre en todo, empezó a bajar su mano por mi espalda, mi fria piel empezó a calentarse por su temperatura mayor, sentí como sus llamas empezaron a derretir mi vestido—Te dejaré desnuda pequeña—Me había preparado con una ropa interior hermosa como para que me hiciera eso—Deja mi ropa interior cariño—Mis manos se deslizaron hasta su camisa de botones, los empecé a abrir hasta que pude sentir su abdomen desnudo, su estupido y hermoso abdomen que me tenía como loca siempre, por mi baja temperatura dejo un suspiro en mis labios, sentí como el vestido cayó al piso, lo bueno de tener dinero es que lo pude comprar para que lo hiciera mierda—Esa hermosa corbata queda muy bien con mi ropa interior—Me pido que se la mostrara, era roja, todo lo había planeado, ese era mi día de que me dejaran rota—Te ves demasiado bien, eso hace que quiera mis calientes manos recorran todo tu frío ser—Deje guiarme y me senté arriba de sus piernas, estaba demasiado caliente ya—Por favor tocame hasta que mi ser desaparezca—Suplique por su atención, empezó a desabrochar mi sostén, dejando mis pechos a su merced, con sus manos empezó a pellizcar mis pezones, estaba muy extasiada, sus calientes toques me complementaban, no podía mentir mis bragas estaban empapadas de solo pensar en el—Enji mete tu pene en mi ya por favor—Soltó una ronca risilla, me estaba torturando, con tan solo unos cuantos toques ya estaba que me moría de placer, atacó de nuevo mis labios dejando atrás mis pechos—Desnudame pequeña—No esperé ni un segundo y empecé quitando su saco y camisa, baje de la cama poniéndome de rodillas, desabroche su fajo y baje sus pantalones, viendo sus boxers con un bulto más grande de lo normal—Siempre me toco en la regadera pensando en tu hermoso cuerpo—Confesó, no esperé ningún segundo las y baje su bóxer, dejando ver su enorme pene*¹ con una erección no completada, la tome con mis manos, empecé a bajar y subir con una velocidad lenta, soltaba gruñidos muy bajos, con eso solo hacia que mi libido subiera de inmediato, no espere más y mi lengua empezó a formar círculos en el inicio de su pene, sentí su pre semen en mi lengua, estaba feliz de esto, como pude metía más de su pene en mi boca, no era como si cupiera mucho pero hacía en intento—Así pequeña, come todo mi pene—El estaba abusando de su poder conmigo, dejé de chuparle el pene, quería lo mío—Enji déjame montarte—Sabia que estaba desesperada, tomo mis brazos y volvimos a la posición de un inicio, empecé a frotar su pene con mi ropa interior, solo me limité a soltar pequeños gemidos. Me aventó sobre la cama, dejo de ser el delicado y hermoso hombre que era a diario y empezó a ser el hombre que era en la cama—Te voy a dar un oral, abre tus piernas ya—Como lo dijo, flexione mis piernas y las abrí, mostrando mi ropa interior que supuse que estaba mojada por la cara que hizo, su enorme cuerpo se abalanzó sobre mi y con desesperación rompió mis mallas, se acercó a mi pelvis y con sus dientes bajo un poco mi ropa interior, se desesperó un poco y la termino rompiendo al igual que las mallas, dejo al descubierto mi vagina, vi como relambio sus labios y bajo completamente devorando toda mi parte íntima, sentía como su lengua hacia magia—¡Enji!—Solo gemía y gritaba su nombre por sus bruscos y excitantes movimientos, era todo lo que necesitaba, su lengua repasaba mi clitoris, sentí como uno de sus dedos se metía en mi cavidad, estaba muy caliente a lo que mi espalda hizo una curva—Siento muy apretado mi dedo, quiero sentir mi pene dentro de ti—Dios, sentí como metió 2 dedos en mi para acostumbrarme a algo más grande—Enji...¡Meteme tu pene ya!—Sabía que estaba torturandome, seguía haciéndome el oral, sentí como todo mi interior, sentía su respiración en mi vagina, los movimientos de sus dedos y su lengua en mi—Te la voy a meter—Se posicionó arriba de mi, mirándonos a los ojos, con desespero metió todo su miembro en mi, solté un grito de dolor pero de placer al mismo tiempo, todavía no se movía pero sentía que iba a correrme. Empezó a mover su pene dentro de mi, eran estocadas que me torturaban, muy lentas pero precisas, tocaban mi punto G hasta hacerme gemir como nunca lo había hecho, Enji por su parte solo se veía rojo y muy sudoroso, soltaba unos gemidos tan gruesos que me exitaban más de lo que estaba—¡Deja de torturame y dame como si me odiaras!—Deteste decir eso al segundo, sus embestidas ya eran rápidas y desesperadas—Si te odiara no te fallaría así—Lo susurro en mi oído sin descuidar sus movimientos, era muy rudo pero era muy placentero, sentí como mi interior se contrajo, iba a tener un orgasmo si seguía así—¡Enji no pares!—Aumento su velocidad demasiado, sentía que me iba a romper pero el placer aminora el dolor, sus manos tomaron mis caderas para ser más profundas sus penetraciones, realmente empezó a quemarme ya que estaba el muy caliente, escuche como sonó algo pero lo ignore porque pensé que era el ruido de la cama—¡Mierda ____!—En cuanto dijo eso eyacule, pero la cama se partió en 2—¡¿Qué mierda paso?!—Dijo mientras salía de mi y veía como había dejado la cama—Rompiste la cama de tan duro que me diste...Estoy feliz por eso—Solto una risa y miro mis caderas, eso hizo que yo también las viera—Joder te queme, ven—Me cargo como un costal, me dio una nalgadas bastante fuerte, solté un gemido de la sorpresa—Vamos a bañarnos—Vi que su erección todavía no se bajaba así que aproveche, al estar abajo me recargue en una pared—¡Enji quiero que me folles de nuevo!—Empecé a hacer un berrinche, el abrió el agua fría sobre de mi, solo me dio un pequeño escalofrío—Voy por condones—Vi como salía del cuarto de baño, aproveché para quitarme el maquillaje corrido y soltarme el cabello, escuche como entraba de nuevo, cerré la llave del agua y me acerqué a besarlo. Mientras nos besamos sentí como metió su pene entre mis piernas y vagina, estaba simulando penetraciones haciendo eso, estaba estimulando mi clitoris, mientras gemía entre besos el aumentaba la velocidad —¿Puedo hacerlo anal?—Solo dije que si con la cabeza, me recargo en la pared más cercana del baño, lentamente empezó a meter su gran pene en mi ano—Enji, por favor ve despacio—Realmente dolía, en las pocas veces que tuvimos sexo nunca fue así, éramos nuevos los 2, sin experiencia, pero joder esto era demasiado excitante, sentía su longitud en mi—¿No te incomoda?—Dijo mientras se recargaba en mi espalda y tomaba mis pechos, los masajeaba y pellizcaba—No, puedes moverte—Sentí sus penetraciones lentas, los 2 formábamos una sinfonía de gemidos, su velocidad incrementó demasiado, sentía como mi interior se retorcía de placer—Estoy apunto de venirme—Aviso para aumentar sus penetraciones, esta vez eran más profundas, vi que en mi abdomen tenía una protuberancia, sentía que era su pene, estaba llegando muy profundo, mis piernas temblaban y no podía seguir en pie, tomo mis caderas para después sentir como se detenía—Listo—Los 2 estábamos extasiados, salió de mi, lo miré a la cara de nuevo, vi como sacaba pequeñas flamas de todo su cuerpo, quitó el condón de su pene y lo echo al baño para después tirar de la palanca—¿Quieres otra ronda o porque me miras?—Se veía sumamente avergonzado, no era una persona que soportara mis miradas tan profundas—Sí, pero primero hay que bañarnos y relajarnos un poco—
Salimos de ducharnos, había sido una ducha romántica, llena de besos y "te amo", realmente había olvidado lo que había dicho, me tomo desprevenida de mi cintura—Rompimos la cama, tendrá que ser en el sillón—Se sento en el sillón más grande, dejándome arriba de el, empezó a besar mi cuello sentí como mordía y dejaba marcas—Montame—Ordeno, como si de ley se tratase busque su pene con mi mano, ya estaba erecto así que lo metí en mi vagina, era lento como bajaba y subía por su erección, todavía me dolían las caderas, aún así sentía demasiado placer—Eres muy lenta—Dijo Enji para después agarrar mis caderas y ayudarme con la velocidad, mis gemidos ser aumentaban al igual que sus suspiros y gruñidos por parte de él. No duramos mucho en esa posición, era demasiado excitante ver como Enji disfrutaba de chupar mis pechos y yo disfrutando de su gran pene en mi vagina—¿Puedo venirme dentro?—Con dificultad dije que si con la cabeza, este aumento la velocidad llegando a marcar sus manos en mis caderas, sentí como su caliente líquido lleno mi cavidad vaginal—Te amo—Dijimos al mismo tiempo para cerrar nuestro acto de amor con un beso apasionado.
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¿Qué esperaban?, Ese wey si o si está grande c: *¹
Ayuda, q pena subirlo pero pues x, quien soy yo para juzgar...
