Un Corazón Para Dos (CAMREN)

19 - "Siendo Feliz"

POV Camila

Eran más de las 7 de la noche había llegado horas después de lo que había prometido.

Por supuesto mamá abogaba por ella, pero no comprendía que entre ambas había un acuerdo, sábado y domingo era sagrado para la familia debíamos estar juntas y sin nada de trabajo.

Iba sentada a espalda de ella abrazándola, el hecho que de que este enojada no quiere decir que no quiera estar con ella o abrazarla como hago ahora, vamos subiendo la pendiente de aquella colina, muy conocida para nosotras donde tuvimos excelentes momentos.

Apenas redujo la velocidad abrí mis ojos, notando enseguida una serie de bombillas azules que creaban un camino hasta la cima del lugar.

Sonreí sin que me mirara estaba emocionada, amaba cuando estábamos solas y juntas así como ahora, ya estaba perdonada por perderse todo el día.

Traía dos paquetes amarrados en el tanque de gasolina en la moto, estacionó, la apago y bajamos.

Me quite el casco se lo di ella lo tomó colocándolo en el manubrio junto con el de ella. Desamarro las cuerdas que sujetaba los paquetes y los tomó, se las arreglo para tomarme de la mano izquierda y caminamos por el camino de luces hasta llegar a la cima.

Coloco los paquetes en la mesa que estaba ahí con dos sillas, se giro mirándome sonreía abrazándome por la cintura.

Michelle:_pasaremos la noche aquí... ¿Te agrada la idea? -dijo colocando un mechón de mi cabello detrás de mi oreja derecha.

Camila:_¿Es seguro estar aquí? -eso era lo que me preocupaba con tantas cosas pasando, chicas desaparecidas y asesinadas era obvio que podíamos correr peligro.

Michelle:_Es seguro, le he pagado a un par de chicos para cuiden allá abajo, tengo un cliente que es policía y también le pedí que patrullara por aquí, además de hacerse el loco si nos ve haciendo algo por aquí... -dijo oliendo mi cuello dejando un beso húmedo detrás de mi oreja haciendome erizar.

Camila:_Lo que vamos hacer es cenar.... -dije mirando a nuestro alrededor- Y dormir. -ella Sonrio un poco.

Desempaco las bolsas era comida hecha guardada en tazones, bebidas y un colchón inflable matrimonial con sábanas, de una vez lo instaló debajo del árbol sonrei mirándola arreglarlo.

Me senté en la grama mirando la ciudad se veía preciosa, luego mire el cielo obscuro y estrellado esta noche no nos acompañaba la luna, pero si habían muchas estrellas iluminando el momento.

Ella colocaba los dos platos, copas, cubiertos y luego comenzó a servir la comida sonreí sentada abrazada de mis piernas con mi cabeza apoyada en mis rodillas, encendió un par de velas, era muy tosca con las cosas románticas pero a mi eso me mataba, su esfuerzo era valioso para mi.

Michelle:_Ya es hora! -grito aun dándome la espalda.

Me puse de pie camine con cuidado y la abrace ella se quedó quieta, olisquee su espalda, la amaba como una condenada coloco sus manos encima de las mias mientras la seguía abrazando.

Camila:_Te Amo aunque a veces te odie también. -susurre dejándola tomando asiento.

Michelle:_¿Por qué me odias? -dijo confusa.

Camila:_Porque me dejas tirada por el trabajo... -susurre tomando un sorbo de mi copa, era un vino exquisito.

Michelle:_Amorcito... Solo amaso la fortuna para nuestros hijos. -la mire quedándome tiesa enseguida.

Ella no noto mi reacción, tomó asiento tomando el tenedor para comenzar a comer.

Camila:_¿Has dicho hijos? -pregunté mirándola fijo, ella se removió un poco contrariada y asintió- No se si será un problema de ahora en adelante en nuestra relación pero yo no quiero tener hijos. -intento decir algo pero de su boca no salía nada- Nunca hablamos de hijos antes de casarnos asumí que tampoco querías. -dije mirándola.