El Bosque

Se cuenta que una vez, hubo un chico que se perdió en un bosque.

Aquel bosque era enorme, si bien se contenía en un lugar más pequeño.

Él siempre decía como los demás bosques podían ser fascinantes, pero parecía temerle al suyo.

Ya que de que caer en lo profundo de su bosque, nadie lo encontraría.

Intento de muchas formas hacerlo más agradable.

Buscando de qué manera se resolvería.

Invito a voces ajenas a visitar su bosque.

Pero nadie parecía ver el problema.

Exclamaban como los arboles parecían estar sanos y fuertes.

Y admiraban lo frondoso del bosque.

Aquel chico brillaba con una luz tenue.

Pero al irse las demás voces, volvía a ver el problema.

Su luz volvía a extinguirse.

Las bellas flores se transformaban en venenosas setas.

Capaces de intoxicar a alguna de aquellas voces.

La frutas que dieron vida al bosque

Se ponían agrias, y luego se marchitaban.

Los arboles parecían perder sus hojas.

Quedando solo como recuerdos de un mejor momento.

El chico intento seguir adelante, pero tropezó con las raíces.

Cayendo sin rumbo, temió lo peor.

Una y otra vez, tropezó y cayó en lo profundo del bosque.

Rodeado por arboles grises, dejo salir un dolorido llanto.

Mientras era observado por los búhos de su mente

Pensó muchas veces en acabar con el bosque.

Sin embargo, los búhos estaban dispuestos a proteger su amado hogar.

E incluso con su repetida presencia.

No dejaron que lastimara al bosque.

Tiempo después, las demás voces no veían al chico.

Esta vez, se sumergió por su cuenta en el bosque.

Tratando de hallar la manera al problema

El chico tomo el primer paso.

Y si bien aún le temía

Le dio un abrazo de bienvenida a su bosque.