¡No me jodas, Baji! || Baji Keisuke x OC

Capítulo 14: Club.

[ BAJI ]

—Veinte minutos, no más —me advirtió Draken saliendo de la habitación.

Me metí en la regadera rápidamente y comencé a ducharme. Shampoo, jabón, enjuague... Todo pasó por mí en menos de ocho minutos.

Al salir, sequé mi cuerpo lo más rápido que pude y luego pasé la secadora por mi cabello. Lo dejé seco a tres cuartos para que el resto se secara en el camino. Después de eso, lo cepillé.

Me dirigí al mueble de la ropa y tomé una camisa casual de vestir en color negro, cerré los botones y la arremangué hasta los codos. En la parte de abajo utilicé un pantalón gris obscuro con unos zapatos en color negro. Tomé algunas de mis cadenas y me las puse en el cuello, luego me coloqué mis anillos favoritos y el brazalete negro que siempre acostumbraba llevar puesto. Por último me rocié la loción. Guapo me veo, de eso no hay duda.

—Ya nos vamos —anunció Draken en la puerta.

—Ya voy, ya voy —tomé mi celular, mis cigarrillos y mi billetera.

Iríamos a Zen, uno de los clubes más populares en la ciudad. Después de haber salido de casa, yo ahora mismo me encontraba conduciendo el auto con Angry, Chifuyu, Mikey y Smiley como mis pasajeros.

Fuimos los primeros del grupo en llegar, nos bajamos del auto y rápidamente pasamos al lugar, Emma se había encargado de reservar el rincón de siempre. Solíamos reservar siempre la misma esquina, una en donde había sillones y una mesa, estaba bastante cerca de la barra y la pista de baile se encontraba justo enfrente.

Pedí una cerveza y sería la única que tomaría en la noche. Pronto le di un sorbo y en ese momento el resto de los chicos llegó.

—Hola, Baji —me saludó Hakkai.

—¿Qué tal? ¿Cómo están? —dije cuando vi que también llegaba Yuzuha.

Todos saludaron a ambos hermanos, luego visualicé a Miya llegando a la escena.

Su cabello largo estaba peinado con unas ondas sutiles y sus ojos enmarcados con algo de maquillaje, también llevaba un labial en un tono rojo. Y una vez más lucía condenadamente bien.

Ahora mismo quería estar en el lugar de Yuzuha, quien estaba abrazándola mientras la saludaba.

Me gustaban los clubes, pero hoy no quería venir, aunque debo admitir que mis ganas aparecieron mágicamente cuando vi a Miya con ese vestido puesto. Llevaba unos tacones en color negro y una cadena diminuta, era tan fina que casi resultaba imperceptible.

Ella y Yuzuha se acercaron para que ésta pudiera saludar a los gemelos, en ese momento los ojos de Miya se posaron sobre mí.

—Creí que no querías venir —dijo al verme.

Bebí otro sorbo de cerveza mientras caminaba hacia ella.

—Vaya, creciste —solté mirándola, estábamos bastante cerca.

Con esos tacones puestos, ahora su nariz llegaba a mi barbilla.

—Así me resultará más fácil poder besart...

Ella inconscientemente llevó su mano a mis labios, esa era la seña de "cierra la puta boca". Aunque eso definitivamente no funcionaría para callarme y, de hecho, lo único que logró fue que mis ganas de hablar aumentaran.

Retiró su mano.

—Baji, no tengo idea de por qué al final te dignaste a venir —dijo en voz baja—, pero te advierto que no quiero juegos hoy.

Sonreí.

—Pero si sólo a eso venía... —puse mi mejor cara de tristeza.

—Toma, bébelo —dijo Emma tendiéndole a la chica un shot, luego me dedicó una mirada—. Y oye, no molestes, Baji.