Ella Es Mi Calma ©

Capítulo 12.

Capítulo doce

Aaron García.

—¿Bailar? —Preguntó aguantándose una carcajada—. ¿Con Julia? —Yo solo lo miré serio y volví a poner mi mirada en mi teléfono. Él se empezó a reír.

—Ya para ¿no? —Respondí algo enojado por la burla que me estaba haciendo Zack.

—Ya ya —Dijo dejando de reírse—. Pero Julia baila bien. No deberías preocuparte por eso

—No quiero bailar frente de todo el colegio —Mencioné dejando el teléfono en la mesa empezando comer.

—Pero no te molestaría bailar con Julia ¿Cierto? —Al Zack decir eso quedé imaginándome la escena. Julia, tan cerca de mi bailándome sensualmente y sus ojos verdes clavados en los míos y en una fracción de segundos ya no estaba bailando, estaba arrodillada y con sus ojos igual de conectados a los míos, era hipnotizante, pero su boca estaba ocupada.

Ladeé mi cabeza sacando esa imagen de mi cabeza para no provocar que algo se despertara.

No respondí y mire la pantalla de mi teléfono viendo la hora—. Hay que ir a clase —Dije levantándome poniendo mis manos en mis bolsillos. Después de unos segundos Zack se levanta y camina a mi lado saliendo del comedor.

Los pasillos estaban llenos, algunas chicas saludaban a Zack y él le respondía amablemente. Miré un grupo de chicas al frente de un casillero. Anna estaba ahí con dos chicas, Ella me ve y me sonríe despidiéndose de ellas y camina hacia nosotros.

—¡Hola!, ¿listos para mañana? —Dijo con cierta emoción.

—Claro —Respondió Zack.

—Te notas algo emocionada —Mencione mirándola unos segundos abriendo la puerta del salón para que pasara.

—¿Por que no debería estarlo? —Preguntó entrando al salón y Zack detrás de ella. Al parecer las fiestas de Luis son buenas. Sonreí, una noche de descontrol no me hará daño. Cerré la puerta tomando mi asiento saludando a Erika.

—Has estado perdida —Ella me miró.

—He estado algo ocupada —Me respondió sin pensar mucho.

—Ya —Pause asintiendo lentamente mirándola—. ¿Irás a la fiesta de Luis mañana? —Pregunté abriendo mi cuaderno.

Dudo unos segundos—. Claro —Me le quedé viendo unos segundos. Pero antes de que dijera algo más. Antes de que el profesor hablara la puerta se abrió y para mi sorpresa, la chica que estaba en la puerta era Julia. Me miró unos segundos.

—¿Busca algo? —Preguntó el profesor Correa.

—Si, ¿Me permite un momento a Aaron? —Levanté mis cejas con expresión de impresión. Me giré mirando a Zack y escondió una sonrisa con su mano.

—Señor García —Me levanté del asiento y caminé hacia la puerta y cuando estaba enfrente de ella sonreí al ver el rostro de descontenta de Julia. Ella al ver mi sonrisa viró los ojos.

—¿A que se debe esta bonita pero inusual visita? —Dije al estar frente ella.

—A las cinco, en el salón de baile de Richard Monroe —Dijo volteándose.

—¿De quien? —Pregunté con notable confusión.

—¿No sabes quien es Richard Monroe? —Respondió con un gesto indignado preguntándome.

Ladee mi cabeza—. Mira, te paso a buscar a tu casa y vamos a ver a ese Richard More.

—Monroe —Aclaró con indignación.