Todos saben que el más dulce puede ser el más cruel.
Pero aquí no, Momo está de mal humor y más cuando escucha como Izuku habla sin parar, ¿qué puede hacer?, besarlo para que se calle.
Dirigiendose a los dormitorios iba un trio de amigos, un pelirrojo de dientes afilados, un rubio de cabellera rebelde y una chica pelinegra con un enojo tremendo, ¿espera?, ¿por qué eso?
Momo: Si dicen una palabra más, les juro que los mataré.
Katsuki: ¿A ti que te pasa cola de caballo?
Apenas dijo eso, la mencionada frunció el ceño para así, agarrarlo del cuello.
Momo: Porque me ha llegado el maldito de Andrés y si te vuelvo a escuchar hablar, me desquitare contigo.
El rubio asintió asustado para así, ser soltado por la chica que salió caminando para irse directamente a su cuarto ante el inmenso dolor que sentía en el cuerpo, más en específico el vientre.
Eijiro: Escuché que una mujer puede tener cambios de humor así de erráticos pero, esa chica de verdad que la debe de estar pasando muy mal.
Miro a su amigo solo para notar como este estaba muy perdido en sus pensamientos.
Katsuki: ¿Se atrevió a gritarme?
Eijiro: Si y será mejor que no la retemos, ahora está tan enojada que no creo que mida sus ataques.
Katsuki: Pues entonces me las va a pagar, ¿dónde esta ese Andrés?
Eijiro: No creo que lo encuentres.
E ignorando la tontería dicha por su amigo rubio se fue seguido de Bakugo quien sin duda, ya estaba maquinando su nuevo plan para ganarle a Momo en un combate 1 vs 1.
Alcanzaron a la chica quien mantenía una mano sobre su vientre.
Eijiro: ¿Necesitas algo?
Momo: Dejar de ser mujer.
Eijiro: Si bueno, no creo que podamos con eso.
Momo: Entonces no me molesten.
Así, llegaron a los dormitorios donde Kirishima se adelantó para abrirle la puerta a la chica.
Momo: De verdad disculpen chicos pero, ahora me duele más que nunca y lo único que quiero es estar tranquila.
Es como si el destino le dijera que no pues vio como estaban en la sala platicando a voz alta lo que hizo enojar a la chica que juraba, mandaría a volar al primero que le hablara en un tono de voz alto.
Eijiro: Yaomomo, por favor, respira hondo y luego exhala.
Momo: ¡No me digas que hacer!
Denki: ¿Verdad Midoriya?, podríamos trabajar en equipo con la clase B creando nuevas estrategias.
Malas palabras pues Izuku apenas escucho eso, siendo que ya era algo inconciente, comenzó a murmurar a una velocidad impresionante que dejó helado al grupo de chicos y espanto a Kirishima al vez la vena sobresalida de la frente de Momo.
Eijiro: Espera , no hagas una tontería.
Si, estaba enojada pues comenzó a caminar directo hacia el peliverde y cuando notaron su presencia, todos se espantaron viendo como la chica venía y no con intenciones de platicar o siquiera pasar de largo, se dirigió directamente hacia el origen de su molestia siendo nada más y nada menos el peliverde que no supo el porque todos se alejaron de él hasta que miro al frente solo para ver a la chica quien lo miraba fijamente.
Momo: ¡Cállate carajo!
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Y así, llevo sus manos hacia el chico quien cerro los ojos asustado al creer que lo iban a golpear, algo que ni Kacchan se atrevió a hacer pero lo siguiente, para su sorpresa no fue nada más que la chica lo jalo hasta unir sus labios con pasión a los del peliverde quien terminó sumamente sonrojado, era como besar un muñeco pues el pecoso ni se movió, solo podía ponerse totalmente débil ante el pasional beso de la chica que sin duda, odiaba admitirlo, le encantó.
Claro que todos quedaron con la boca abierta sin poder creer lo que habían visto.
Hasta que el oxígeno faltó, ambos se separaron.
Sin la necesidad de ser empujado, el pecoso cayó en su lugar tomando asiento con la cara totalmente roja y sin poder articular una sola palabra.
Minoru: ¿Por qué a él si y a mi no?
En cuestión de segundos, el enano pervertido fue pateado rompiendo la ventana hasta estrellarse contra un árbol.
Momo: Quien me moleste tendrá rosas de mi parte en el hospital.
Con eso dicho la chica se marchó del lugar directo a su habitación.
Izuku: {Me robo un beso}
Sin duda, su primer beso había sido de lo más increíble.
