Yo me quedaría en la casa de mi prima un fin de semana, llegue a su casa y rápidamente me fui a ver a mi prima. Ella estaba en el sillón acostada de espaldas yo pude ver sus plantas de los pies.
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Sin que lo notara empecé a tomar fotos de sus pies. La mamá de ella la empezó a llamar porque la tenía que acompañar a caminar. Ella se dio la vuelta pero no se dio cuenta de lo que estaba haciendo. Ella solo me saludo y se fue a cambiar. Ella y su mamá salieron a dar una caminata, yo me fui al cuarto de invitados y transferi todas las fotos a mi computadora.
Paso una hora después de eso*
Yo sali un momento de mi cuarto dejando la computadora con fotos de los pies de mi prima, Angi (mi prima) entró a mi cuarto sin permiso y vio lo que tenía en la computadora.
Yo entre*
Yo: que rayos haces? No veas nada de eso.
Angi: he, que es esto?. Te gustan mis pies?.
Yo: no.
Angi: entonces que hacen fotos de mis pies en esa computadora.
Yo: no es nada, es un trabajo de la escuela.
Angi: si, aja, eso ni tu te lo crees.- dijo enojada.
Ella me miró directamente a los ojos.
Angi: mira, si te gustan mis pies, solo me lo hubieras dicho. A mi me gusta tener hombres a mis pies, aunque de otra forma, pero tu serias el primero en estar a mis pies de otra manera.
Yo no respondí, me quedé sin palabras... Angi se quito el zapato sensualmente y lentamente, dejando salir todo su olor.
Angi: ven, si te gusta, o me vas a decir que no te gusta?
Yo: sss... no.
Angi cerró la puerta de mi cuarto y se sentó en la cama. De forma sensual empezó a mover el zapato, haciendo que se me pusiera duro. Ella lo noto...
Angi: solo ven, no me digas ahora que no te gusta el olor. Si yo se que matarias por olerlo.
Yo no me contuve y me lanze al suelo a sus pies y empecé a oler su zapato, era muy fuerte su olor lo cual hacía que me gustará aún más.
Angi: ahora tu serás mi hombrecillo de pies.
Yo: si, si, si.- dije mientras olía su zapato.
Ella se quito una calceta, yo levante la cabeza y ella sin decirme nada me metió su calceta en la boca. Ella me estaba dando el placer que nunca pude tener antes, ella me estaba viendo con unos ojos coquetos. Yo me saque su calceta de la boca y la empecé a olfatear muy profundo. Ella sonreía al ver como me humillaba ante ella.
Angi: para esclavo.
Yo me detuve y solo me metí su calceta en la boca y me levante del suelo, me quedé parado frente a ella. Angi sensualmente pasó su pie por mi entrepierna una y otra vez.
