3.

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    — ¿¡NO PUEDES TENER UN POCO DE CONSIDERACIÓN!?
    — JODER PAPÁ, ¿¡ME PIDES QUE SEA CONSIDERADA CUANDO NO TE PREOCUPAS NI POR TU ÚNICA HIJA!?
    — CIERRA LA BOCA, NO PIENSO HACERME CARGO DE TI SI NO TRIUNFAS CON TU MALDITO SUEÑO.
    — ¿¡CREES QUE TE NECESITARÉ!?
    — Hija por favor. –Dijo su madre.
    — ¿Por qué es tan difícil que me apoyen? –Dijo llorando.
    — JODER TN, SÉ MADURA, NO SERVIRÁS PARA ESO. –Gritó su padre para después golpearla y hacer que esta caiga al suelo golpeando su hombro izquierdo con uno de los muebles de aquella oficina.
   — ¡Tn! ¿Estás bien? ¡DIOS JAE SOON ¿QUE TE PASA? –Gritó desesperada.
    — NO PIENSO HACERME CARGO DE ELLA SI HARÁ LO QUE LE PLAZCA. –Sin más salió de aquel lugar y no volvió hasta dos días después.

Tn se sentía tan inútil, tan impotente, no entendía que pasaba por su cabeza, y cuando menos se lo esperaba estaba llorando al lado de Seojun, era al menos más abierto que Suho, así que se sentía mejor con él que con Suho, pero ella no quería esto, sabía que no podía estar toda la vida apoyándose de Seojun o Suho, quería autoreconfortarse, sin embargo también quería aprender a defenderse físicamente, debido a que desde ese día, su padre se volvió más violento con ella.

Conforme crecían sus oportunidades aumentaban o al menos para Suho, Seojun y Seyeon, esos chicos lograron entrar en una agencia los tres como aprendices, sin embargo Seyeon tuvo aún más posibilidades y logró debutar, por otro lado, Tn, Suho y Seojun lo apoyaron durante el comienzo de su carrera, Seyeon estaba demasiado feliz de haber cumplido sus sueños, sin embargo y para él habían más haters que fans.

    — No leas esas cosas si te lastiman. –Dijo Tn tomando el teléfono de Seyeon. ¿Sabes? Tienes una muy buena oportunidad, apenas estas empezando.
    — Eso es lo que me preocupa.
    — ¿El que apenas estés comenzando? ¿Por qué?
    — Apenas tengo fans, en un futuro todo el mundo me odiará.
    — Oye, nadie te va a odiar, no has hecho nada malo para que eso pase. –Dijo Suho sentándose en el suelo a un lado de Seyeon.
    — ¿Ustedes que saben? Yo debuté, ustedes no, Tn ni siquiera ha tenido la oportunidad de entrar a alguna agencia, no saben como me siento.
    — Tienes razón no lo sabemos pero tú mismo te estás haciendo daño leyendo esos malos comentarios de gente que probablemente tengan 12 años apenas. –Dijo Seojun.
    — No lo entienden, jamás lo harán.
    — Seyeon por favor, dejanos ayudarte. —Dijo Tn levantándose después de Seyeon.
    — Seyeon, piensa que esto probablemente solo sea temporal, solo eso.  —Dijo Suho poniendo una mano en el hombro de Seyeon, a lo cual Seyeon tan solo salió de ese lugar.

Y así comenzó la preocupación de Seojun, Suho y Tn, tratando de buscar la manera en que a Seyeon le dejaran de afectar esos comentarios. Suho pasaba por problemas al mismo tiempo que Seyeon, por lo que se sentía mal al tener que apoyarlo pero no poder contarle sus problemas también. Trataban y trataban de hacer reflexionar a Seyeon, pero él no soporto tanta presión llegando al suicidio, así dos de ellos se enteraron por medio de las noticias mientras que Tn lo presenció todo.

Los tres se sintieron mal, lógicamente debido a que era su mejor amigo, Suho culpándose a si mismo por no contestar esa llamada, Seojun por no haber llegado a tiempo, y Tn, por no imaginarse que Seyeon sería capaz de cometer suicidio y que justo en ese momento él no estaba bien. Ahora Seojun se dedicaba a recordarle a Suho la causa de no haber evitado la muerte de Seyeon, y con esto Tn tan solo lloraba la muerte de su amigo mientras soportaba los gritos de su padre.

    — TN ENTIENDE CIERRA LA PUTA BOCA. –Dijo su padre golpeándola en la mejilla.
    — ENTIENDO, TE LIBRARÁS DE MI. –Fue lo único que dijo Tn para después ir rápido a su habitación agarrar una maleta y guardar casi toda su ropa, tenía algunas cosas necesarias, sin más salió de su casa para no volver mientras escuchaba a su mamá gritando su nombre, al salir se sentó en una de las bancas de un parque que quedaba cerca de su casa y comenzó a llorar y preguntarse en su mente ¿por qué era tan patética? ¿Por qué no podía tener un buen padre? ¿Por qué su familia era tan disfuncional?

Cada vez se volvía peor su situación, Tn ya no tenía a Suho o Seojun para reconfortarla, así que tenía que aprender a defenderse sola. Sin embargo, y aunque tenía pensado unirse a una clase de Taekwondo para conseguir fuerza, se mudaron a Canadá, por fortuna, encontró un buen lugar donde comenzar a entrenar, así que todo mejoro por lo menos un poco.  Y todo iba normal sin involucrarse con nadie en su nuevo instituto, saliendo seguido de casa sin tener que soportar ver a su padre. Todo bien, hasta que años después tuvieron que volver a Corea, sin duda, no fue una buena noticia, eso solo significaba que el trabajo de su padre no iría tan bien, aunque pudo retomar sus clases de Taekwondo, no se sentía 100% satisfecha.

    — ¿Sabes? No es muy normal que las chicas se unan, pero si ya tienes práctica creo que estará bien. –Dijo el entrenador.
    — Esta bien.

Después de eso le dieron el horario, y un poco de información, así que fue al día siguiente.

    — Oye ¿por qué estás aquí? ¿Como te llamas?
    — No es tu asunto largate.  – Contestó Tn
    — Oye solo quiero saber... Oh por cierto mi nombre es Hwang Hyun Jin, yo en realidad no estaba seguro de entrar aquí, pero creo que es la mejor opción... Quiero ser idol enton–
    — ¿Quieres cerrar la boca?
    — Oh si, perdón.

Ese chico tan solo quería la amistad de Tn, sin embargo, ella no se la daría y mucho menos si el sueño de este era ser idol. Su nuevo Instituto tampoco la ayudaba, encontrarse con esos chicos era demasiado estresante y abrumador, y ahora tener que encontrarse con ese chico ahí era aún peor, todo el mundo le haría preguntas si se llegaban a enterar que práctica Taekwondo.

    — ¿¡YO QUE DEMONIOS TENGO QUE VER CON QUE HAYAMOS REGRESADO!? —Grito Tn.
    — CÁLLATE POR DIOS
    — AQUÍ EL QUE NO ESTA TRIUNFANDO ERES TÚ. –Su padre la interrumpió dándole un golpe, esta vez fueron más, y su madre no estaba para defenderla, ella logró darle unos golpes a su padre y con eso salir de su casa.
    — Joder. –Dijo saliendo de casa mientras se tocaba la frente, al retirar su mano vio como esta tenía un poco de sangre.
    — ¿T - Tn?

Ella quedó helada al reconocer esa voz, alzó la mirada lentamente encontrándose con Hyun Jin.

    — H-Hwang..
    — ¿Estás bien? ¿Que pasó? –Dijo acercándose a ella preocupado.
    — Estoy bien yo–
    — No estás bien, debemos ir al hospital, mira como estás.
    — Hwang yo–
  
Hyun Jin sabía que Tn se negaría así que la cargó y se dirigió a ir al hospital ya que no estaba tan lejos, al llegar solo esperaron un poco y en unos minutos una enfermera estaba curando las heridas de Tn y colocándole un vendaje en la frente.

    — Dios Tn ¿quién te hizo esto?
    — Nadie yo... Olvídalo y no comentes nada de esto a nadie ¿entendido?
    — No le diré a nadie pero con una condición. –Dijo Hyun Jin mirándola
    — ¿Condición?
    — Sé mi amiga, entonces tu secreto estará a salvo.
    — Está bien, pero tampoco digas nada sobre las clases de Taekwondo, si escucho que alguien además de ti  dice algo sobre eso.. Te mato. –Dijo Tn con una mirada retadora.
    — Esta bien, no tienes por qué preocuparte... ¿Te quedarás aquí? ¿Tienes donde ir?
    — No me quedaré aquí... Yo... Me puedes... ¿Acompañar a un lugar?
    — ¿Un lugar?

Tn y Hyun Jin salieron de ahí, lógicamente después de haber pagado, de lo cual se encargó Hyun Jin, Tn se dirigió junto con él a un gran edificio, en el cual Tn tenía un pequeño departamento.

    — Wow ¿aquí vives? –Dijo observando al rededor.
    — Algo así. –Contestó Tn buscando algo, y cuando lo encontró se lo dio a Hyun Jin. Tomalo, no tenías porque haberme ayudado, pero igual te agradezco.
    — Oye no, que dices, tomalo como un favor de amigos, probablemente no hayas hecho lo mismo por mi, pero no me hubiera gustado haberte dejado ahí.
    — Solo tomalo, favor con favor se paga, ya me estás ayudando con ocultar esos secretos, ten. –Agarro la mano de Hyun Jin y ahí colocó el dinero. ¿Ya comiste? Creo que tengo algo de ramen.
     — Oh no está bien, ya cené, pero debo volver sino mamá se preocupará.
    — Bueno, está bien.

Genial! Pensó ella, ahora tenía un amigo.... No sonaba mal, pero aún así la idea no le agradaba, ahora tenía que esperar un día entero para poder quitarse el vendaje y cortarse el cabello poniéndose un fleco para ocultar su cicatriz.






















heart;; Lee SuhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora