1. Aurora y Gisela

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"Septiembre 2035"

- Tía, ¿Viste mi mochila?- preguntaba la chica colorada de pecas potentes mientras buscaba algo debajo del sillón de la sala, se la podría ver desesperada por encontrar aquello.

La mujer castaña de ojos azules que estaba en el sillon mirando su celular dirige su mirada hacia la chica.

-Aurora- la llama

- Anoche la deje en los pies de la cama, por favor decime que la viste-

- Aurora... No vas a ir.-

La chica se levanto del piso y se sento a lado de su tía sin hacer un solo berrinche, simplemente se mordia el labio inferior y posaba su mirada hacía al piso.

su tía la observaba esperando a que diga algo.

- Es injusto tere, yo no te traigo problemas, solo quie-

Su tía la interrumpió con un suspiro algo ruidoso.

-Sabemos que no traes problemas mi amor, tu abuela y yo estamos muy orgullosa de eso. Pero no queremos que vayas, no todavía.- le dice mirandola con algo de pena

-Pero tía. Es mi deber, quiero salir a marchar, voy a ir con gisela y todas mis amigas. Por favor déjame ir, ustedes me dijieron que cuando ya cumplía los diesiseis podía- le recalcó con una actitud calmada.

- Aurora, te entiendo pero el asunto está más complicado, de verdad no quiero que asistas a está marcha y se acabó. Es mi última palabra, no voy a negociar esto.- dijo como último veredicto antes de que suene el timbre.

Aurora sin bufar se recostó en su sillón mientras su tía caminaba  hacia la puerta.

Unas voces reconocidas parecían estar entrando en la casa.

Quiso mirar hacía la puerta pero un cuerpo se abalanzó sobre ella mientras sentía unos labios finos besarle la frente, rápidamente la reconoció haciendo que se forme una sonrisa en su cara y dejando que su mano sostengan la cintura de la contraria. Era gisela

- ¿Que haces acá?- le preguntó al separarse de la chica, quien miro a un costado donde estaban tere y noemi que intercambiaban algunas cosas de sus mochilas

- ¿Y ustedes a donde van?- pregunto aurora.

- Vamos a la marcha- diría con obviedad noemi quien recibe un codazo algo tarde de tere.

- ¿Es en serio?- le pregunta mirando a su tía. La mujer asiente.

-Muy en serio, por eso te traje a Gisela a casa- dijo con una sonrisa.

-Bueno vámonos que nos esta esperando el remis afuera- la apura Noemí.

- uy si- dice tere, comienza a caminar hacia la puerta sin antes tirarle un beso a su sobrina. -No salgan de casa, tengan los celulares prendidos, esperen a walter que lo trae el micro y...¡ almuercen la pizza que hay en el horno!- gritaría mientras sale de la casa.
Ambas mujeres salen de la casa a las apuradas.

Aurora vuelve a suspirar con frustración y se recuesta en el sillon, gisela siligosame se le recuesta encima.

- ¿Por qué te pones así?, estoy acá con vos- Aurora se pone a mirar el techo mientras lleva una de sus manos a la espalda de gisela.

- Es que tenía muchas ganas de ir a esa marcha, me lleva a la del orgullo desde que tengo diez, pero no quiere que vaya a esa no lo entiendo.-

Gisela levanta la cabeza para mirarla.

- Vos sabes que las cosas son más complicadas ahora. A mí tampoco me dejaron ir aurora- le diría tratando de hacerla entrar en razón.

- Si pero, me dijieron que cuando cumpla diesiseis ya podía. Lo raro es que cuando se lo pregunté a mi abuela inmediatamente me dijo que no, pero muy espantada, parecía de esas viejas del dosmil diesiseis  de las que me habla mi tía- diría entre risitas, bajo la mirada hacía gisela quien no se rió, simplemente se sentó en el sillón.

Aurora la imitó y la miro con los ojos fruncidos.

- ¿Todo... Bien?- le pregunto a la rulosa que parecía estar bastante pensativa.

- emm sisi, todo bien- sonríe algo desconcertada.

Aurora levanta las cejas y la mira fijamente.

- Gisela...-

La chica suspira y bufa.

-Esta bien, no puedo no decírtelo. ¿Que tanto sabes de tu mamá?-

Aurora la mira confundida.

- Eh bueno, que era colorada como yo y...- gisela la interrumpe de inmediato

- no si si, muy hermosa que tanta información tenes-

- ¿A que te referís?-

- Sabes que mi mamá era su mejor amiga, ¿verdad?-

- obvio que se eso, y mi tía era su cuñada y mi abuela su suegra. Gisel, ¿ a dónde querés llegar?-

- Ay no sé, hoy escuche a mi vieja hablar por teléfono con tere y le dijo algo así como que tenían que decirme la verdad- La mira asustada.- Y me da miedo porque también dijeron que tienen que decirte lo de tu mamá.

Un repelus le recorrió la espalda, aquel escalofrío lo sintió el día que su padre se había ido.

Aurora se paro de repente y comenzó a buscar entre los libros que había en el estante de la sala.

- ¿Y eso es?...- dijo al ver que sostenía un libro.

- Es la historia, la historia que tiene escondida mi tía, tengo entendido que es el libro que escribió mi pap- dijo mientras se acercaba pasaba rapido las paginas- El error de una mirada, acá dice... Es la historia de Joy y Marina, pero nunca leí el final, es que- miro la última página y simplemente estaba incompleta. Mira a Gisela - mi papá es joy. Así lo llama mi abuelo, es joy...- dijo mirando a Gisela - entiendo porque no quieren que vaya...- dijo resignada sentandose a lado de Gisela.

- Intentan protegerte- dijo sin más la chica.

- Si... Eso es lo que hacen...- mira el libro. - Pero está no es la historia real, en este libro dice que tu mamá y mi mamá son primas-

Se miraron unos segundos.

- Que asquito- dijeron al mismo tiempo. Sus miradas volvieron al libro.

De repente escucharon un ruido proveniente de la puerta y como era de esperarse era Aron, quien cuando las vió con el libro en la mano trato de retroceder unos pasos  pero Gisela se adelantó y le cerro la puerta.

- ¡Yo sabía que esto me iba a pasar a mí!- Exclamó algo nervioso.

- Habla.- dijo Aurora acercándose a él.

El hombre señalo el libro.

- Leé eso, ahí estan las respuestas yo no se nada- le dijo sintiéndose acorralado mientras cerraba los ojos.

- Tío, por favor. Esto se lo hacen creer a una nena y yo ya no lo soy- miró el libro con desconfianza - Además ni siquiera es la historia real.-

El hombre se salió de en medio y camino hacia el estante de libros, había uno que se parecía más bien a una impresión nombrada "Miradas y Miedos" se acerca a Aurora con aquellos papeles en la mano.

- Tenes razón, ya no sos una nena pero aún así no queremos que sepas esto- dijo señalando con el ojo aquel contenido.

- ¿Qué cosa?- dijo algo confundida.

- La historia real- Le respondió Aron resignado. - Pero leeanlo rápido - les dijo a ambas. - tratando de aguantando el pis que se traía - rápido antes de que lleguen las brujas de sus tías y madre- agrego antes de correr al baño.

           
La duda sembro de alguna manera la garganta de aurora, pero, ¿Qué podía salir mal?

Miradas y MiedosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora