7.- Compañero enfermo

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"Entonces yo tenía razón. Los humanos tienen un alma fuerte pero un cuerpo frágil..." fue lo primero que había pensado Ralsei cuando Susie le contó que Kris no había podido ir al Dark World al estar enfermo. La realidad era que los monstruos no solían enfermarse, ni siquiera por comer cosas que no deberían (como Susie con la tiza), y los monstruos oscuros... mucho menos.

Ralsei se sintió contrariado pues parte de sí quería quedarse con Susie y otra parte quería buscar a Kris. Por suerte para él, Lancer había ido a buscar a Susie poco después así que pudo marcharse sin demasiada culpa... al fin y al cabo Susie había elegido ir con él, no estaba haciéndola a un lado por Kris.

¿O quizás sí...?


Al príncipe oscuro no le tomó mucho llegar a la casa de Kris ya que, después de todo, él conocía aquel lugar a la perfección. ¿De qué otra manera habría re-creado su habitación en el Dark World?

Eso sí, intentó no ser visto por muchas personas. Todavía sentía una chispa de inquietud y ligera ansiedad cuando se le quedaban viendo. "Tampoco me parezco tanto a Asriel..."


No le extrañó encontrar la puerta abierta pese a que Toriel parecía ausente, los monstruos eran muy tranquilos, no por nada había una sola policía para todo un pueblo. Entró cerrando con cuidado y encontró a Kris acostado en el sofá con un molde para pay vacío en el piso y algunas envolturas de lo que parecían ser dulces en el suelo.

"Tu madre adoptiva te ama muchísimo" pensó Ralsei algo divertido, al ver cómo le había consentido en exceso. "No la culpo, yo hubiese hecho lo mismo por ti".


Buenas tardes, Kris. — Saludó en voz baja. El contrario giró un poco y volteó a verlo. — Susie me contó que estabas enfermo y decidí venir a verte, ¿Te parece eso bien? — Kris tardó en responder, pero asintió. — ¿Y qué tal estás? ¿Te sientes bien?


A pesar de que le había preguntado, Ralsei sabía que no obtendría respuesta así que se arrodilló junto a él y colocó una mano encima de su pecho, utilizando su magia en él. Tal y como había predicho, sólo curarle de tratar heridas físicas y agotamiento, no enfermedades.

Aun así, parecía ser poca cosa comparada a lo que había imaginado.


Parece que estás bien, me preocupé un poco. — Se incorporó, mirando a su alrededor. — Pero este sitio está hecho un desastre, será mejor que lo limpie antes de que venga tu madre o podría enojarse.


Lo primero que hizo Ralsei fue levantar el molde para pay y llevarlo a la cocina, abrió el grifo para después lavarlo y dejarlo impecable, después de lo dejó para que se secara antes de poder guardarlo. Ralsei notó que la cocina de Toriel era bastante linda y ordenada, le gustaba la cantidad de utensilios para cocinar que poseía.

"Quizás debería prepararle algo a Kris más tarde".


Buscó la escoba para barrer las envolturas hasta el bote de basura, pero cuando fue hasta la sala encontró a Kris agachado recogiendo algunos de los envoltorios.


Kris, creo que deberías estar descansando. Después de todo, estás enfermo. — A pesar de que se acercó, el humano ni siquiera volteó para verlo. "Es bueno que seas tan decidido". — Está bien. — Asintió, agachándose junto a él. — Es una buena idea, si me ayudas terminaré más rápido y los dos podremos relajarnos. Quizás incluso pueda prepararte algo.


Entre los dos recogieron todas las envolturas y Ralsei fue quien las llevó a la cocina, aprovechado a su vez para asegurarse que todo estuviese en su sitio. El molde para pay ya se había secado por lo cual lo guardó en uno de los gabinetes superiores, aunque le fue algo difícil ya que no era tan alto.

Le reconfortó ver a Kris acostado en el sofá cuando volvió a la sala y se sentó junto a él, soltando un suspiro.


¿Quieres que me quede a ver la televisión contigo o prefieres comer algo? — Preguntó Ralsei. Para ayudarlo a expresarse tomó el control y lo extendió hacia él, para que lo tomase si así quería.

Kris tomó el control... pero lo dejó en el suelo.

Ah, entiendo. — Asintió. — Entonces te prepararé algo, ¿Te gustaría algo en específico o-?


Ralsei se silenció de golpe cuando Kris tomó su mano, la cual seguía extendida hacia él. Segundos después, se acomodó mejor y se quedó quieto, el príncipe de la oscuridad se quedó paralizado unos instantes antes de que sintiese su rostro calentarse y tuvo que desviar la mirada hacia otro sitio.

"Supongo que lo único que quieres en este instante es que me quede contigo..."


No pudo evitar sonreír y cubrir parte de su rostro con su mano libre, sintiéndose tímido pero a la vez feliz por estar de esa forma con Kris... ellos dos solos, compartiendo un momento especial. Ralsei se acomodó mejor, intentando no molestar al humano, quien parecía haberse dormido tomándolo de la mano.

"Este es el tipo de cosas que desearía que durase para siempre" pensó, cerrando los ojos. No iba a dormir, ni siquiera estaba cansado, tan sólo disfrutaría cada segundo de ese momento junto a Kris.

"Noelle tenía razón, quiero mucho a Kris... y eso no tiene por qué ser algo malo".

Un Príncipe Encantador ¦ #FlufftoberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora