Tres años antes de William Clayton, su medio hermano, la abandonaron a la puerta de la mansión de los Queen con una nota que pedía que cuidaran de ella y con su fecha de nacimiento, sin nombre sólo eso.
Oliver junto con Robert la encontraron una ma...
Tras la llamada de la señora Hoffman Oliver regreso a Ivy Town por Emma, poco después decidieron regresar a Ciudad Star, las semanas transcurrieron y Emma volvió a estar en una escuela normal, dónde pese a que no era demasiado extrovertida rápidamente hizo nuevos y buenos amigos; después de esa noche donde no la paso nada bien afortunadamente ni la fiebre o el dolor de cabeza volvieron, pero aún así Oliver la notaba cansada mas de lo que cualquier adolescente debería lo cual no lo dejaba muy intranquilo ademas de que tenía un mal presentimiento al respecto pero no estaba seguro de que se trataba, simplemente se sentía intranquilo.
—¿Todo bien?—, le cuestiono Felicity acercándose a él quien estaba recargado en la puerta de la habitación de la menor, acariciando su espalda—, hey ¿estas bien?—. volvió a preguntar al no haber respuesta la primera vez de su parte.
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—Mh—, la volteo a ver—, si, si... es solo que—, volteó a ver a Emma quien dormía—, no lo sé algo no se siente bien—, hizo una pausa pensativo—, no es normal que este tan cansada y creo que tú también lo haz notado.
—Si, si lo he no, aunque no sé si deberíamos preocuparnos, mas allá de esa noche no ha estado enferma, tal vez es sólo algo propio de la adolescencia—. Dijo intentando tranquilizar al arquero.
Luego de pasar un rato mas allí ambos decidieron por fin ir a dormir y al esa ser la viernes noche del viernes pese a su postulación después de liberar su agenda la mañana siguiente Oliver decidió preparar el desayuno para ambas quería pasar tiempo con ellas, por un momento olvidarse de toda la locura que había afuera simplemente y sencillamente disfrutar la vida hogareña, a su familia; cerca de las 9:00 Emma despertó decidió bajar a investigar que era el olor dulce que se hacía notar en el aire se puso una sudadera de Oliver que había secuestrado del armario de su padre, una vez que bajo las escaleras Oliver volteó a verla.
—Buenos días princesa, ¿cómo dormiste?—. Dijo tomando un plató para ponerlo en el desayunador (encimera, barra, isla, como la conozcan no lo sé).
—Buenos días pa, bien—, dijo bostezando un poco y contagiando a su papá, a lo que ambos se rieron—, ah, perdón—. Dijo pasando una mano por su rostro y sentándose en una de las sillas altas.
—Esta bien, oh buenos días a ti también—. Dijo volteando al final de las escaleras donde estaba bajando Felicity.
—Buenos días Queens—, saludo y Emma rio por lo bajo mientras ella se acercaba para dejar un beso tierno en los labios de su novio—, que bien huele—. Dijo para después sentarse junto a Emma siendo seguida de Oliver quién acarició la cabeza de su hija, para después comenzar ahora sí a desayunar.
Mas tarde los tres decidieron ir al acuario de Star City a sugerencia de Oliver quien recordó que sus padres solían llevarlos a él y a Thea allí cundo eran chicos, ademas de que a Emma le gustaban mucho los peces, se tomaron su tiempo para recorrerlo no tenían prisas, y aunque puede que su hija este muy lejos de ser la pequeñita rubia de ojos azules que dejo atrás el día que subió al yate él la carga en su espalda como si aún tuviera tres años, Felicity iba un tanto mas alejada de ellos pero cuando se volteo la escena de Oliver llevando a su hija en la espalda le pareció adorable y decidió tomarles una foto que paso desapercibida para ambos; cualquiera que no los conociera pensaría que son una familia normal, una linda pareja disfrutando la tarde de un sábado con su hija, pese al hecho de que no lo eran en ninguna manera; al terminar con su paseo regresaron a casa ceca de las 3:30 de la tarde y allí fue donde una c¡vez mas donde la fatiga se hizo notoria al estar subiendo las escaleras a Emma empezó a faltarle el aire en exceso.
