Cherry Boy | WowKwan (Spanish version)

Capítulo 23

"Kwannie." Sehyoon sonrió mientras su novio resoplaba. Actualmente estaban en una videollamada y Sehyoon no dejaba de decir lo lindo que se veía Kwan con coletas.

"Lo sé, soy lindo. Detente." Kwan se escondió de la cámara, haciendo reír a Sehyoon. Sehyoon sabía que se estaba escondiendo para ocultar el sonrojo en sus mejillas.

"Déjame verte." Sehyoon arrulló, mirando hacia donde se escondía Kwan.

"Deja de decir que soy lindo y lo haré." Kwan resopló de nuevo.

"Bien, bien. Me detendré." Sehyoon se rió.

Kwan reapareció, con su rostro enterrado en su almohada y luciendo completamente adorable. A pesar de que sus mejillas estaban cubiertas, Sehyoon pudo ver un poco de su rubor cerca de sus ojos y en sus oídos.

"Te apareces con ese aspecto y esperas que no diga nada". Sehyoon discutió y se rió cuando el rubor de Kwan se oscureció.

"Silencio." Respondió Kwan, hundiendo aún más su rostro en la almohada.

"De todos modos, ¿listo para mañana?" Sehyoon preguntó, sonriendo.

"Sí." Kwan le devolvió la sonrisa, saliendo de su escondite. "No te he visto en un mes, te extraño."

"Yo también, bebé." Sehyoon respondió, recostándose en su cama con un brazo debajo de su cabeza y su otra mano sosteniendo el teléfono. Kwan lo miró fijamente por un momento y su sonrojo regresó.

"Estás demasiado caliente, no es justo." Kwan murmuró en voz baja, pero Sehyoon lo escuchó y sonrió.

"No tan caliente como tú." Sehyoon se rió entre dientes.

"¡Basta, Sehyoon!"

                       ————

Sehyoon revisó su teléfono cuando sonó, lo que indica una notificación.

Kwannie❤: ¿dónde estás? :(

Sehni❤: Llego un poco tarde, lo siento :( Estaré allí en unos minutos

Kwannie❤: está bien, ten cuidado :(

Sehyoon tomó sus llaves y se apresuró a entrar al auto. No podía creer que se hubiera quedado dormido durante tres horas mientras veía una película. Salió del garaje y corrió hacia donde Kwan lo estaba esperando.

Escuchó que su teléfono sonaba con notificaciones, pero nunca las revisó. Conducía, su atención estaba en la carretera y llegar a Kwan lo más rápido que podía.

Estaba por encima del límite de velocidad, pero seguía todas las reglas de tráfico. Sin embargo, si un policía lo atrapaba, estaría en problemas.

Todo sucedió a cámara lenta. El semáforo se puso verde, Sehyoon pisó el acelerador para girar cuando, de la nada, otro coche que circulaba por su carril a toda velocidad se estrelló contra él.

Fue un duro golpe. Los airbags salieron automáticamente. Sehyoon estaba destrozado. Ni siquiera se dio cuenta de que había cerrado los ojos.