Capitulo 4.

407 45 16
                                    

Al abrir la puerta de mi departamento di un suspiro nervioso

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al abrir la puerta de mi departamento di un suspiro nervioso. No podía evitar a la pareja, pero tampoco quisiera verla.

Dejé mi botas donde no estorbaran y me dirigí descalzo hacia la sala. El lugar se encontraba en silencio, algo que se hizo raro en mi. Pero que a la ves fue un alivio, así no habría incomodidad.

Decidí caminar hacía mi habitación, dejé mi celular conectado al cargador, después me dirigí hacia mi closet para tomar la ropa que me pondría. Luego de eligir, me dirigí hacia el baño. Cerré la puerta y comencé a desvestirme, tenía planeado no tardarme tanto, quería tomar al menos algo con Yoonie antes de que se fuera.

Después de terminar de bañarme, tomé mi toalla y con ésta me sequé todo el cuerpo, para comenzar a vestirme con la ropa que elegí y traje conmigo al baño. Me coloqué enfrente del espejo y abriendo el mueble que estaba debajo del lavamanos, tomé cremas para mi cabello y cara. Colocandolas en las respectivas zonas; Peiné mi cabello tratando de quitar los pequeños nudos y finalmente me coloqué una loción. Me miré al espejo, podía observar cada facción mía.

No me consideraba una persona fea, pero tampoco era tan atractiva, lo normal. Sin embargo, para muchos podré ser la gran cosa para otros alguien común. Tal vez para Jungkook fui alguien común, después de todo Jimin parecía un ángel. Su físico no parecía de este mundo. Sacudí la cabeza para sacarlos de mí mente, dando un suspiro salí del baño para ir por mis cosas y salir de ahí.

Luego de tener mis llaves y mi celular sentía que faltaba algo... ¡Por supuesto! Mi cartera. Comencé a buscar por toda mi habitación, quité almohadas, miré de bajo de mi cama, pero no estaba. Inclusive busqué en la sala y cocina. Sin opciones dirigí mi vista hacia la puerta de la habitación de Jungkook.

Que más da, no está aquí, si entro y lo busco no habrá ningún problema. Decidido caminé a pasos rápidos hacia allá y sin ningún cuidado abrí la puerta de la habitación arrepintiendome de inmediato. De todas las maneras que pude encontrarlos, está era la que menos quería. Los dos enredados entre las sábanas. Sentí náuseas de repente, y un vacío en el estómago. Pero aunque quisiera, mi mirada no se quitaba de ellos dos, dormían tan cómodos. Encajaban perfecto.

Entré en pánico cuando vi cómo Jungkook comenzaba a remoberse para levantarse tallando sus ojos, ya no tenía escapatoria.

-¿Tae?- habló Jungkook tratando de mirarme, pero supuse que la luz le calaba.

-Perdón, estoy buscando mi cartera ¿la has visto?- traté de hablar normal, no quería que me viera nervioso por lo que vi.

-¡oh, si! Recuerda que me la dejaste ami. Esta en mi suéter, tomala- dijo señalando a su suéter negro que posaba en la silla de escritorio. Asentí y con un pequeño gracias, la saqué para salir de ahí.

-¡Espera!- dijo un poco alto, antes de que cerrará la puerta de su habitación -¿si?- le dije asomando mi cabeza.

-¿Saldrás?- preguntó acostandose de nuevo en la cama abrazando a Jimin en el proceso. Definitivamente si no me voy de aquí vomitare el rico desayuno que Yoongi preparo y eso no es lo que deseo.

Inesperado/ Taegi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora