𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟔

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[•EL sᴇᴄᴜᴇsᴛʀᴏ•]

«ɴᴀʀʀᴀᴅᴏʀ»

Era una fría tarde de invierno en, en cierta agencia un detective encogido se encontraba jugando un videojuego. Jugaba mientras ignoraba los llamados de la adolecentes a cargo de él, después de muchos intentos, la chica logró llamar su atención.

-Te lo digo enserio Conan- Hablo preocupada- tus padres te dejaron aquí, ahora mismo están en el extranjero, pero ya a pasado mucho tiempo, ¿no te sientes solo?

-No, en realidad no -Dijo mientras su mirada se dirigía otra vez a la pantalla de la Tv para seguir jugando su videojuego, intentando de que la joven dejara el tema.

-De seguro que no se siente solo porque siempre está contigo- Respondió Kogoro mientras despegaba la vista del periódico, un leve sonrojo apareció en las mejillas de aquel detective encogido -¿Qué tipos de padres son los tuyos? Ni siquiera nos han llamado para saber de ti o algo, además de que no hemos sabido nada de ellos desde que llegaste.

Conan comenzó a sudar y a ponerse nervioso, Kogoro se levantó del sofá y se acercó a su hija Ran la cuál estaba cerca de Conan, comenzaron a tener la idea de pedirle al profesor Agasa el número de teléfono de los padres del niño.

El susodicho algo nervioso comenzo a discutir con Kogoro intentando que este dejara la idea, pero mientras discutían se escucharon unos golpes en la puerta, Ran se dirigió a abrirla y al hacerlo se encontró con una señora un poco gorda y a su lado una chica de más o menos la misma edad de Ran, aunque era unos centímetros más alta, la señora y Ran hablaron por un rato, al terminar volteo feliz mirando a su padre y a Conan.

-¡Están aquí!- Gritó Ran feliz y con una gran sonrisa- Conan son tu madre y tu hermana.

Ambos detectives se detuvieron y miraron a las dos mujeres en la puerta, la señora se acercó al niño.

-Mi pequeño, lo siento por dejarte solo-Dijo con una sonrisa mientras se acercaba a Conan para abrazarlo, aquella chica se mantenía detrás de ellos mirando con una sonrisa la escena - No te preocupes, ven, vamos a casa con mamá.

-¡¿Quiénes son ustedes?!- Preguntó alterado mientras se apartaba del abrazo.

Ran pregunto algo extrañada que pasaba, la chica le explicó que solo era una pequeña rabieta por haberlo dejado solo todo este tiempo.

La señora para terminar de convencer a Ran le mostró su tarjeta de presentación, el detective encogido miro impresionado la escena frente a él, la chica miro de reojo al detective que la miraba nervioso, la chica le regalo una sonrisa algo aterradora provocando que el niño retrocediera algunos pasos hacia atrás. Después de hablar unos minutos con el señor Mouri, aquella señora y la chica junto con el niño bajaron para después entrar a un auto. La mujer se sentó en el asiento del conductor mientras que la joven iba sentada en el de copiloto sentando a Conan en sus piernas, aquel niño había permanecido en silencio con la cabeza agachada, se despidieron de los Mouri y comenzaron a alejarse.

Después de unos minutos, Conan decidió hablar.

-¿Quiénes son ustedes?- Preguntó desconfiado y algo nervioso por la cercanía de la chica.

-Que tonto, somos tu madre y tu hermana mayor-Respondió aquella chica con un tono dulce y una sonrisa- ¿No te acuerdas de nosotras?.

-No, eso no es cierto, yo si tengo una hermana, pero es mi gemela y es menor que yo por sólo 6 minutos, y mi madre es...- Antes de terminar fue interrumpido por aquella señora.

-Yukiko Kudo- Respondió con una sonrisa algo aterradora, el detective se cayo y asiendo que la chica formará una sonrisa siniestra- tu madre enamoraba a los hombres de todo el mundo, cuando tenía 19 años ganó todos los premios y la aclamaron la como la actriz más bella del país.

𝗟𝗮 𝗛𝗲𝗿𝗺𝗮𝗻𝗮 𝗱𝗲 𝗦𝗵𝗶𝗻𝗶𝗰𝗵𝗶 𝗞𝘂𝗱𝗼 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora