17 de junio de 2016, Nevis
He querido continuar este diario luego de varios incidentes que no debería recapitular porque están como entradas en los otros días del diario. Últimamente recuerdo demasiado a mi mamá y en cómo ella había puesto su confianza en que algún día haría cosas enormes. ¿Qué tipo de cosas en específico? No tengo ni idea, ya que "cosas" es algo con tantos significados que quizá nunca me vería en la capacidad de encontrar el significado detrás de esas cosas enormes. Aun así y aunque ella ya no está conmigo ni con Jem, confío en que nos está observando de algún lugar. Hace un mes que James trabaja con Cato, no pudo esperarse a que terminaran las clases, sino que aceptó la oportunidad luego de darse cuenta de que nuestros fondos eran escasos. Yo me ofrecí a tomar su lugar, pero acordamos que lo mejor sería no distraerme de mis estudios. La verdad es que bien podría hacer ambas cosas, aunque no le llevé la contraria porque sabía que eso podía terminar en una discusión en la que los dos queríamos salir bien parados por el bienestar del otro.
De hecho, el examen final de este año será sobre uno de los libros que tuvimos que leer durante el curso. Hace unas semanas me lo releí por si acaso se me había pasado algo en la primera leída, quisiera decir que me sorprendió que todavía lo recordaba bien todo, pero ese no era el caso. Algunos dirían que tengo demasiado cerebro como para solo medir metro y medio. Con mi hermano nos reímos de lo cierto que es eso.
Debo admitir que trato de no parecer tan formal como en mis tareas de la escuela, aunque para este punto creo que ya es obvio que no he logrado aquello. Me disculpo. Ando en las nubes tratando de imaginar cómo sería vivir fuera de la isla. Los libros me han ayudado a imaginar ese lado del mundo con rascacielos y calles angostas, el ruido del tráfico y las personas caminando de un lado a otro sin mirar a los demás porque están demasiado ocupados en sus asuntos. Una ciudad como esa parece inexistente porque no habría casas como las de aquí. Como la mía. Pero tiene nombre. Y he leído tantas veces ese nombre que para este punto podría decir que conozco esa ciudad sin siquiera haber puesto un pie en su suelo. Su nombre es Nueva York.
En realidad, creo que ya lo entiendo.
Nueva York parece un sueño lejano. Un lugar del que se habla demasiado en los libros como la gran oportunidad de realizar el sueño americano. Y siendo sincero aquí en la isla no veo una forma de cumplir esas grandes cosas de las que mi mamá me hablaba. Quizá Nueva York es la salida. Le funcionó a Gatsby en los veinte y a Holly en Tiffany's, seguramente le funcione a Alex en Manhattan.
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25 de marzo de 2019, Nueva York
El baño está inundado de agua. Apenas puedo comprar algo para la cena y me han dicho que, si no pago la renta en dos semanas, perdería el apartamento. Nueva York apesta. Literal. Al menos en la parte donde vivo, por acá debo tomar casi una hora antes el metro para llegar a tiempo a mis clases. Siendo sincero, la vida que quisiera tener en Nueva York, la vida de los libros está en el Upper-East Side de Manhattan y no en mi laptop rota o en la chica que me acaba de dejar.
Pensándolo mejor, si hoy me da una neumonía por caminar en medio de la noche, lo agradecería. Aunque es primavera y seguro lo mínimo que hace es una ventisca.
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25-26 de marzo de 2019, Nueva York
Es más de medianoche pero para mí sigue siendo el mismo día. Spoiler: llovió torrencialmente. Estoy seguro de que mañana amaneceré terrible, pero eso ya ocurría cuando me quedaba hasta tarde haciendo tareas, así que las ojeras no me preocupan. Pensé que me iban a secuestrar o peor, pero estaba siendo muy dramático. Ando en nieto del apartamento de mis sueños. Podría ser mejor, pero comparado con la caja de cigarrillos en la que vivo es perfecto. Mientras caminaba conocí a John, me acompañó hasta su apartamento y me dejó cambiarme de ropa por la lluvia. Acaba de salir volando a recoger a Anthony del veterinario, por alguna razón había dejado a su mascota en una veterinaria a medianoche. Sí, sé lo que estarás pensando Alex del futuro y no, no es un secuestrador.
Espero.
Hablamos un poco antes de que se fuera y se ve como alguien agradable. Muy lindo también, a pesar de que aún no entiendo por qué estaba caminando solo bajo la lluvia. Incluso intercambiamos números y creo que él de hecho confía más en mí para haberme dejado en su apartamento con todas sus cosas. O es que tiene demasiado dinero como para importarle cualquiera de las cosas que hay aquí. Me gusta más la primera alternativa.
Me dijo que estuvo en Afganistán a los dieciocho. Decidí creerle porque también me habló de su herida en la pierna que lo hace medio cojear e incluso me di cuenta de eso mientras caminábamos.
Adivina.
Tenemos programada una salida con él y sus amigos, me acaba de llegar el mensaje.
¿Y si este es el inicio de mi propia historia?
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N/A Alex es demasiado dramático para su propio bien. Este es un trabajo que me mandaron a hacer en la universidad, pero que también es como un punto de vista alterno en el AU principal que tenemos Bar y yo en Bar_Writer así que eso, gracias por leer esto si lo leen ;D
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In the Winter's Trail - one shots lams
RandomEsta es una colección de historias, algunos cuentos y por lo general one-shots de parejas que rondan a menudo en mi cabeza. Adéntrate a mi mundo si te atreves, quedas advertido. Para más información, revisar el índice. Incluye: • Lams • Kingbury • H...