Espérame a las 3 | Angry & Hakkai

Capítulo único

Espérame a las 3.
Souta x Hakkai.
Semi-AU + OoC.
Capítulo único.

N/A:  Uh...

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Se le rompió el corazón cuando vio un par de lágrimas descender por el rostro de Hakkai. Sentados debajo de un árbol ambos chicos de cabello azul se reunieron esa tarde después de que, el que derramaba lágrimas citara al menor de los gemelos Kawata sin dar detalles.

—Le dije a Taka-chan que me gusta.

Angry no dijo nada, no quería decir nada, porque no tenía nada para decir. En especial después de escuchar dicha oración que había sentenciado a su corazón a estrujarse hasta hacerle sentir un nudo en la garganta.

—Pero como verás... no resultó bien.

¿Cómo se consuela al chico que te gusta cuando ha sido rechazado? Angry quería tener la respuesta de inmediato. No le gustaba ver a Hakkai llorar.

—¿Por qué yo? —no es que le molestara estar allí para él, pero por lo que tenía entendido no eran tan cercanos. Hubiese sido más creíble que hablara de esto con Takemichi o Chifuyu.

—Takemichi y Chifuyu no respondían mis llamadas. Necesitaba desahogarme con alguien ¿a quién más le hablaría? ¿A Yuzuha? Ni hablar, seguramente iría con Taka-chan y no quiero pasar más vergüenza. Por eso te llamé.

Angry hace como que no le duele ser la última opción.

—¿Mitsuya te rechazó?

—Bueno, sí. No está interesado en nadie... y cuando digo nadie, es absolutamente nadie —Hakkai limpió su rostro, sintiéndose un poco –sólo un poco– mejor. Cuando se armó de valor para decirle lo que sentía no esperaba que Mitsuya le respondiera que era Arromántico.

—¿Qué piensas hacer ahora?

—Como seguramente diría Yuzuha, seguir adelante. —respondió sonriendo un poco, como si sonreír fuera lo más difícil en ese momento. Pero lo que era realmente difícil era la parte de seguir adelante, una cosa era decirlo y otra muy distinta era arrojar por la borda todo lo que estuvo sintiendo por Mitsuya por años— Aunque fui rechazado por Taka-chan, seguimos siendo amigos.

Souta desvió la mirada hacia el cielo, seguía sin tener nada que decir. Pero si que tenía ahora un nuevo miedo desbloqueado, el miedo de armarse de valor algún día y ser rechazado por él.

—Vamos al Arcade.

—¿Uh? —Angry lo miró, ambas miradas azules se mantuvieron fijas en el otro por un par de segundos y solo por un momento deseó que aquel momento pudiera durar más de lo destinado.

—¿Te gusta jugar? Yuzuha y yo a veces vamos al Arcade cuando nos aburre los bolos. Hay que ir ahora mismo —con la motivación sacada de quién sabe donde Hakkai se levantó de su sitio y sujetó la mano de Angry para llevarlo consigo. Para seguir adelante Hakkai sabía que no podía quedarse en su lugar lamentándose cuando podía ir a divertirse y olvidarse de lo que pudiera amargarle el día mientras jugaba Metal Slug o Pac-man.