Paul Hart (profesor y efecto)

Inicios de atracción parte dos

Al día siguiente no tenia clase en la universidad así que me dediqué a no hacer nada. Salí a correr un rato y al regresar me di un largo baño con agua caliente.
Mientras estaba en la tina no pude dejar de pensar en Sabrina y lo bien que me sentía junto a ella -Su carpeta!- Recordé que la tenía. Salí de la ducha con una toalla enredada en la cintura y comencé a leer su investigación. Realmente esta chica me sorprendió con su reporte, era muy amplio e impecable, con una buena representación y escritura en cada párrafo. Sonreí al darme cuenta que algo grande me estaba causando Sabrina, me atraía su inteligencia y belleza. Sentía una gran química por parte de ella también.
Después de eso pedí pizza para comer, vi una de mis películas favoritas y después una serie completa.
Al anochecer me preparaba para el día siguiente, vería a Sabrina y quería verme bien. -Tal vez la bese- Dije en voz alta sin que me diera cuenta.
Comencé a buscar en el placard algún traje ajustado y decidí que sería uno gris que era hecho a mi medida, pero cuando comencé a ganar más músculo me empezó a quedar un poco apretado de los brazos y piernas, pensé que me vería bien. Después escogí una camisa azul celeste para resaltar el color de mis ojos y arregle un pequeño doblez que tenía.
Me quedé dormido poco después de las 9:30, no había nada más importante que hacer.
A las 6:30 sonó mi alarma y desperté emocionado por ver a Sabrina y enseñar a los alumnos.
Me duché rápidamente y vestí con el traje que ya había escogido. Desayuné unos huevos con vino, era de mañana pero se me antojó en vino, tomé casi tres copas, lo que me puso un poco contento.
Mientras conducía a la universidad sentía unas ganas que crecían más y más mientras más me acercaba a la universidad. Sentía unas ganas incontrolables de besar a Sabrina, la deseaba.
Llegué a la universidad a las 9:30, Sabrina estaba en otra clase así que me dirigí a la cafetería, saqué mi laptop y pedí un par de panes con aguacate y un jugo de frutas. Prepare una hoja de Exel para hacer anotaciones de cada alumno y revisé algunos correos, entre eso y comer dieron las 10:20, me preparé para subir a clase y a unos metros de la puerta del salón de clases di un gran suspiro, me arreglé el saco y al cruzar la puerta vi a Sabrina, estaba tan linda como siempre.

Buenos días -exclamé entusiasmado-

Analicé a Sabrina por un par de segundos, tenía puestos unos baggy jeans de mezclilla muy ajustados en la cintura, un top básico beige con un bolso largo de tela color negro, no quería dejar de mirarla pero tenía que continuar con la clase.
Intenté no distraerme con Sabrina y me senté enfrente de mi escritorio.

Hoy revisaré el avance de todos, pueden hacerme preguntas o pedir sugerencias, sólo acérquese a mi escritorio- Dije con una voz un poco grave para que todos escucharan.
Miré a Sabrina y sonreí, ella me estaba prestando atención con sus pequeños ojos fijos en mis manos.

Saqué mi laptop y me senté para esperar a los alumnos. Pude notar de re ojo que Sabrina no dejaba de mirarme. La verdad, que me mirara así me ponía nervioso, me incitaba a pensar cosas y me distraía de mis pensamientos racionales.
Saqué mi celular y le escribí un correo rápidamente:
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De: Paul E. Hart (pehart@gmail.com)

Para: Sabrina Evans (sabsvans@gmail.com)

Asunto: Debe abrirlo ahora mismo

Usted no deja de mirarme.
Señorita Evans, ¿y su avance?

- Paul E. Hart.
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Justo al enviarlo alce mi mirada para ver su reacción.
Sacó su celular y mientras leía el e-mal me miró rápidamente y vi sus mejillas enrojecer con una media sonrisa muy coqueta.
Comenzó a teclear y me quedé esperando su respuesta.