➤ V E L E R O 「 Sebastián Córdova 」

❯ N u e v e

「 𝙴𝚜𝚝𝚎𝚏𝚊𝚗í𝚊 」; 🍒

— Ahora entiendo el motivo de esa sonrisa. — dijo Sandy burlona.

Le había contado de la llamada que me hizo Sebastián ayer, me dio mucha felicidad saber de el después de varios días.

— ¿ que puedo decirte Sandy?, no se ni siquiera que esta pasando conmigo. Jamás me había importado mucho si alguien se iba de mi vida sin más, pues finalmente si lo hacen no serán obligados a quedarse o serán rogados por mi — solté un suspiro. — es solo que no se, hay algo dentro de mi que me hace querer tener a Sebastián cerca. — explique con gestos de confusión.

Sandy dejó sus cubiertos sobre la mesa, dejando de lado su desayuno. La mire y ella sonrió tímidamente.

— ¿ exactamente que sientes y piensas de Sebastián? — pidió ella con cautela, me encogi de hombros.

— pues... Me gusta su compañia, me es fácil hablar, ser cariñosa y natural con el. — ella asintió.

— ¿ y que piensas de el? —

— bueno... Por lo que he visto es alguien tranquilo, coqueto puede ser, pero solo en broma. — solté una risa. — es divertido y sabe entender lo que le dices a la primera, osea es inteligente, además de que se cuida muy bien, tiene buena condición física y ejercita su cuerpo. ¡ claro!, también es muy... — Sandy me interrumpio

— Basta, basta Estefanía, me queda muy claras las cualidades que ves en el. — la mire apenada por que realmente había hablado mucho con respecto a sus cualidades. — pero niña, ahí solo me respondiste que es lo que ves en el, no lo que piensas de el. —

Sandy tenía razón, ella me hizo una pregunta y yo muy contenta respondi lo que veia en el como cualidades. ¿ pero que pienso de Sebastián?, sinceramente no lo se del todo.

— ¿ entonces? — pregunto de vuelta mi amiga.

— pienso que es un chico caballeroso y lindo, que hace cualquier cosa por sus amigos. En pocas palabras es bueno, es atractivo y muy buena onda conmigo, me a Tratado bien en lo poco que llevamos de conocernos. — Sandra me señalo y asintió con una sonrisa.

— eso es lo que quería escuchar, Dios Estefanía, ¿ no te das cuenta? — la mire sin entender.

— Sandra no vayas a salir con una tontería por favor — pedí algo hostigada al ver su sonrisa maliciosa.

— Estefanía que tontería ni que nada, es muy obvio que estas comenzando a sentir atracción por Sebastián — la mire sorprendía.

— Sandra eso no es verdad, apenas y nos estamos conociendo.

— ¿ y eso que tiene?, así se comienza. Se conocen, ves sus virtudes, a la larga sus defectos y también comienza la atracción física. — suspiro. — luego viene el enamoramiento. — negué divertida.

— estas loca Sandra, Sebastián solo es un buen amigo. Es más, te repito que llevó poco de conocerlo y no se mucho de el, tampoco el sabe mucho de mi. — ella rodo los ojos.

— Bueeeno, el día que te des cuenta que si te gusta me haré la sorprendida, ¿ vale? —

Sandra me miro divertida mientras se levantaba de la mesa para dejar su plato en el fregadero y lavarlo.

Yo me dedique a terminar lo que quedaba de desayuno en mi plato. Mire a Sandra subir a su habitación, seguramente por sus cosas.

Unos segundos después bajo, ella me miro con una sonrisa.

— piensa en lo que te dije, date cuenta de que si te gusta — se acercó a besar mi mejilla. — nos vemos en la noche — se retiró de la cocina y seguidamente de la casa.