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1 año después

Asahi y Jaehyuk tenían dieciocho años, ambos habían celebrado sus cumpleaños y estaban muy felices.

—Sahi, ¿Terminaste?— pregunto Jaehyuk mientras estaba en su teléfono.

—Ya casi— le entregó un folleto con una explicación para Jaehyuk ya que le había faltado y su amigo era demasiado tonto como para hacerla solo.

—Te debo una, te quiero sahi— se acercó con ternura a Asahi.

Tenía que llegar temprano a la celebración.

Cuando llegaron a la fiesta de recién llegados todo el mundo le sonreía a Jaehyuk, se había convertido en el chico popular, sinceramente era la razón por la que miraban con desprecio a Asahi.

Entraron a la fiesta encontrándose con una grata sorpresa, era chaeryeong, después de que hace un año habían terminado, Jaehyuk había caído en algo de depresión pero se recuperó rápidamente en unos dos meses.

La chica los miró sonriente, sin embargo ella era fuerte a pesar de que Jaehyuk parecía un idiota, es tan bonita, amable, atenta, y Jaehyuk tan Jaehyuk.

—¡Chae!— sonrió.

Asahi de inmediato se fue a la barra de bebidas, hace unos momentos se sintió atacado, quería contarle a Jaehyuk pero justo cuando regreso a la fiesta.

Las lágrimas de Asahi habían resbalado por sus mejillas al ver a Jaehyuk dándose un profundo beso con aquella chica pelinaranja. Sus ojos estaban tristes y caídos, sus labios se apretaron y en una plática con su cabeza sobre si largarse o no, se dió media vuelta y comenzó a caminar lejos de aquella fiesta.

Ya una vez fuera de la fiesta, llegó a tierra dándose cuenta del gran bosque que abarcaba toda la orilla de la casa, ¡Diablos!, ¿Cómo llegaría a casa sin tener miedo?

—¡¿Asahi!?

Escuchó la voz de Jaehyuk a unos kilómetros, de alguna manera inconciente comenzó a correr lejos por la carretera libre mientras oía cada vez más cerca los pasos del chico, escuchando el fuerte aire de su velocidad golpear las hojas de los árboles, cada vez más cerca, a decir verdad Jaehyuk Era muy rápido. Tomó el brazo de Asahi le dio la vuelta para encontrarse con aquellos ojos fríos cual hielo con lágrimas y sangre de sus labios por haberlos mordido tanto.

—¿Qué quieres, Jae?

—¿Porque estás huyendo?…— Lo miró con la respiración agitada.

—No estoy huyendo, te confundí con alguien malo tal vez— sin excusas, era una mala persona sin sentirlo.

—¿Acaso no reconoces mi voz?— pregunto mientras trataba de calmarse.

—Ya no— Solo pudo soltar otra lágrima.

Aún cortante, haciendo al otro apretar la mandíbula molestó.

—Espera, ¿Lloraste por qué te perseguía?— lo miró con las cejas fruncidas

—No idiota, olvídalo— No aguantaba las ganas de gritar y simplemente llorar del enojo.

—No lo olvidaré si se trata de ti, ¿Qué sucede?— lo miró con aquella ternura en sus ojos como cuando tenían siete años.

—Muchos desearían tener a un amigo como tú, ¿Por qué estás detrás de mi?— por fin dijo esas palabras, las palabras que Jaehyuk nunca espero escuchar.

Un amigo como él, leal, fuerte y amable que se preocupa por ti y que le importas como si fueras el oro más brillante, nadie pensaría que es un ser divino y que jamás te abandonaría apesar de que fuera una desición de vida o muerte.

—No lo sé…— agachó la mirada.

Ambos se quedaron en un incómodo silencio, se miraron a los ojos y Asahi hizo un movimiento del cuál empezó a arrepentirse, se lanzó sobre su amigo y unió ambos labios. El otro chico estaba estático, le tomó de la cintura, se acomodó y correspondió aquel beso, después de todo no se arrepintió. La separación de ambos labios fue por falta de aire, se sentían ahogados.

—¿Que fue eso?— mientras una ligera sonrisa se asomaba.

—¿Crees que yo lo sé?— fingió molestía.

Asahi hizo al otro sonreír de manera traviesa.

—Asahi, ¿Te gusto así?— pregunto.

—Depende— aún sin mirarlo directo a los ojos.

—¿Cómo que depende?¿De qué va a depender?—Contestó sorprendido en un tono más agresivo, haciendo al otro reír.

—¿Yo te gusto así?— los nervios invadieron su ser completamente.

—Sí, claro— firmemente respondió.

—Entonces tu también me gustas así— sonrió.

—Espere esto, aún que no lo quisiera decir— Dijo Jaehyuk, entonces eso habría funcionado si tan solo asahi tuviera algo de valentía.

—¿Y chaeryeong?— pregunto.

—No me gusta, solo qué siempre traté de esconderme por qué te amaba a ti, de la persona que te hablé hace un año eras tú, sinceramente el mundo me asustaba— Asahi se sintió tranquilo— quise bloquearme por completo.

—Ya no tienes que— acunó la cara de Jaehyuk y sonrió, dándole un rápido beso.

Jamás quería sentir que se acababa, un momento eterno que esperaba durar para siempre.

Awww

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¿Te gusto así?-Jaesahi |Terminada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora