𝓓𝓮𝓼𝓲𝓻𝓮 [ᴇʀᴇᴍɪɴ] [ᴇʀᴇɴ x ᴀʀᴍɪɴ]

Única parte.

.Deseo.

Pasos apresurados, respiración agitada y el corazón casi en la garganta. Eren camina muy rápido, con dos bolsas de plástico negras en su mano. Se detiene en el semáforo, mientras traga en seco y ve la hora en su reloj de mano.
Esta nervioso, no sabe cómo se tomará Armin la "sorpresa" que está preparando. Sabe que arruinó la noche anterior por completo. ¿El "Por qué"? Eren se siente celoso. ¿Que tiene de malo? Bueno, siente celos por un personaje ficticio.

Armin, su novio y futuro esposo es amante del Yaoi. Cosa que a Eren no le molesta para nada. Lo que realmente le molesta es el "amor y obsesión" hacia MD, uno de los "Husbandos" de Armin. Desde que conoció al joven rubio observó un cierto interés especial por ese personaje. Armin nunca lo callo, siempre que puede molesta a Eren diciendo que sería interesante tener sexo con él, haciendo codsplay de MD. Eren por su parte, siempre se enoja fácilmente por eso, aunque realmente el joven rubio lo dice bromeando. Aunque realmente a Eren se le ha pasado por la mante hacerlo de esa manera, no es lo que hará, ¿Por qué? Eren siente que se pierde la diversión si hace eso.

Eren es uno de los mejores investigadores y Armin es veterinario, muy diferentes, ¿no? Precisamente el trabajo de Eren fue el que los hizo conocerse, ¿Como no recordar aquella tarde lluviosa? Eren aún recuerda la primara palabra que cruzó con Armin, aunque realmente recuerda la respuesta. "¿Que signo eres?" Eren pensó que Armin sería el típico chico de los signos, aunque realmente Armin solo dijo eso para iniciar una conversación. Llevan cuatro años de relación, han tenido sexo y compartido muchas experiencias. Apesar de eso, los problemas en las relaciones no se pueden evitar, ¿O si?

El semáforo por fin cambia de color, Eren traga en seco y cruza la calle hasta llegar a un enorme edificio. Comienza a entrar por la puerta principal y camina hacia el elevador.

—¡Eren! —El portero del edificio, Hannes saluda con una sonrisa, Eren suspira y arregla su corbata.

—¿Ya llegó Armin? —El de ojos ámbar oprime el botón de la puerta del elevador. —¿Esta borracho? —Hannes rápidamente sonríe y asiente. Eren suspira y niega con la cabeza. —¿Ha visto subir a Armin?

—Aún no ha llegado. —Eren asiente y voltea a verle.

—Cuando llegue... quiero que cuando veas su auto estacionarse me llames lo más entes posible. —El muchacho arquea una ceja confundido, sin preguntar o hacer alguna objeción asienta con la cabeza.

Eren comienza a entrar al elevador, observa a la gente entrar y salir con una mirada fría y aburrida. Eren oprime el botón del número de su piso y se ve en el reflejo del vidrio del elevador. Frunce el ceño, su cabello largo sujetado con una liga se ve un poco alborotado, su traje está arrugado y sus zapatos con polvo le quitan el brillo completamente. Eren suspira al sentir como el elevador se detiene. Sin perder el tiempo baja del elevador, para entrar a su enorme departamento.
El castaño rápidamente se dirige a la habitación principal, donde comparte cama con Armin.