La catástrofe del culto |BillxDipper|

∆ Capitulo único ∆

2177 palabras

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Dipper gruñó detrás de su mordaza y tiró de las cuerdas que sostenían sus brazos sobre su cabeza. Fue oficial, tuvo la peor suerte. Tuvo la peor suerte y Mabel lo iba a matar. Sin embargo, no era como si fuera su culpa, no 'pidió' ser secuestrado por una secta. Simplemente sucedió.

Había estado caminando por el bosque un minuto y al siguiente tenía una bolsa en la cabeza y lo estaban llevando a algún lugar. En realidad, no estaba seguro de dónde estaba. Solo le habían quitado la bolsa de la cabeza el tiempo suficiente para envolverle los ojos con una venda. Y en el breve par de segundos había podido echar un vistazo a los uniformes amarillos a juego con las insignias que no había logrado distinguir. Así que es más probable que se trate de una secta. Un culto que probablemente planeaba sacrificarlo o algo igualmente alarmante.

Oh, sí, Mabel lo iba a matar.

El murmullo silencioso a su alrededor se hizo más fuerte a medida que el culto se acercaba a la mesa de madera a la que lo habían atado. Hubo un vago movimiento de tela a su alrededor y supuso que lo estaban rodeando, formando tal vez un círculo. Apretó los dientes alrededor de la mordaza, odiaba no poder ver. El arrastrar los pies pronto se detuvo y en su lugar amaneció un nuevo sonido. Cantando, en latín. Excelente.

Bueno, al menos ahora podía decir con certeza que eran una secta. Lo que realmente no lo hizo sentir mejor acerca de la situación en la que se encontraba. El cántico aumentó y, de repente, alguien agarró su camisa y algo frío presionó debajo de ella. Fue un cuchillo del que se dio cuenta segundos después, cuando le atravesó la camisa, abriéndola por el frente de una manera que nunca tuvo la intención de abrir. Dejó escapar una protesta ahogada por el trato que estaba recibiendo su ropa que fue ignorada cuando dicho short fue dejado a un lado, revelando su pecho y estómago.

Se le ocurrió que probablemente debería prestar menos atención a su ropa y más atención al hecho de que uno de los miembros del culto ahora sostenía un cuchillo en su pecho. La morena se tensó contra la mesa mientras el cuchillo se clavaba y 'arrastraba'. Gruñó de dolor, torciendo la cabeza hacia un lado cuando una especie de símbolo fue grabado en su pecho. Dolía, pero sobre todo porque solo estaba rompiendo la piel, lo suficiente para que la sangre se acumulara en los cortes superficiales. Así que sí, fue doloroso, pero en cierto modo fue más una picadura que un latido.

Sin embargo, no cambió el hecho de que alguien estaba haciendo dibujos usando su piel y sangre. Honestamente, eso lo asustó más que el hecho de que había un cuchillo en su carne. Cuando el cántico alcanzó un crescendo, el cuchillo fue retirado y la luz estalló alrededor de la habitación. Era obscenamente brillante, debió ser para él poder verlo detrás de la venda de los ojos, pero la luz fue empujada al fondo de su mente porque solo podía concentrarse en una cosa.

La risa. Una risa horriblemente familiar, alegre y burlona que atravesó la habitación de manera más limpia y clara que el cuchillo a través de su piel. Reconocería esa risa en cualquier lugar.

"Bueno, bueno, ha pasado un tiempo desde que fui convocado así." La voz engreída y alegre de Bill admitió y Dipper habría gemido si no estuviera ocupado presa del pánico. "Dios, Louise, ustedes realmente hicieron todo lo posible, ¿no? Velas colocadas de manera ritual, corazones de cabra, círculos de invocación dibujados en sangre y-" se interrumpió y Dipper supo sin ser capaz de ver que el demonio lo había visto. "Ahora hay una sorpresa".

La voz de Bill sonaba tensa como si estuviera conteniendo la risa y parecía insoportablemente complacido. "Oh Pine Tree, el sacrificio humano es un buen aspecto para ti". Dipper lo fulminó con la mirada desde detrás de la venda de los ojos, pero tenía la sensación de que el demonio debió haberlo atrapado de alguna manera porque se rió de esa manera distorsionada y resonante suya. "Sabes, normalmente los sacrificios humanos no son lo mío, no te como bolsas de carne y no tengo ningún uso para esclavos o sirvientes que tengo que tener conmigo todo el tiempo." Una mano extrañamente humana tocó su mejilla y Dipper se sobresaltó, tratando de alejarse de ella, pero se encontró incapaz de llegar lejos.